Duhalde presiona al Parlamento
El presidente aseguró que si el Congreso no aprueba esta semana el nuevo Plan Bonex, los bancos igualmente tendrán que abrir sus puertas, "y que sea lo que Dios quiera".
Duhalde dijo que habló con los titulares de ambas cámaras legislativas, José Luis Maqueda (Senado) y Dante Camaño (Diputados) para que aprueben el proyecto que, según reveló, ya envió al Congreso.
“La situación la conocemos. Hay mucha más gente que quiere cobrar que dinero en los bancos”, que calculó en 60.000 millones de dólares, y reiteró que estos fondos “los tienen prestados a 3 ó 4 años promedio. Si la gente va a sacarlo ahora, es imposible”, advirtió.
Por otra parte, el presidente manifestó que no piensa renunciar a su cargo y consideró que “no le conviene a nadie” su salida anticipada.
Además, señaló que “los que vengan, no sé si se animarán a tomar este barco en una situación tan difícil”.
“Yo tengo un mandato del Parlamento, si el Parlamento no está de acuerdo tendrá que elegir otro presidente”, sostuvo en Casa de Gobierno.
Asimismo, también reiteró su confianza hacia el titular del Palacio de Hacienda, Jorge Remes Lenicov, al calificarlo de “ministro de lujo”.
En otro orden, el primer mandatario afirmó que sería una “irresponsabilidad” de su parte llamar a elecciones adelantadas para jefe de Estado por considerar que esa alternativa sería “dejar al país a la deriva por cuatro meses”.
“Si la mayoría cree que ésa es la solución… a mí me parece que no es la solución. En medio de la turbulencia de la Argentina lo menos conveniente sería dejar el país a la deriva por cuatro meses.
Sería una irresponsabilidad de mi parte”, sostuvo en Casa de Gobierno, al ser consultado sobre la posibilidad de adelantar elecciones.
Por otro lado, Duhalde admitió que si se sigue retrasando el acuerdo con el FMI “deberemos demorar los festejos”, que prometió para el 9 de julio, ante una hipotética reactivación económica.
“Pensaba tener ahora un acuerdo. Cuanto más se demoran estos acuerdos, seguimos en terapia intensiva”, advirtió el jefe del Estado al formular declaraciones en Casa de Gobierno.
Duhalde reiteró que “los dos temas para pasar a terapia intermedia” son “la solución al corralito, que ha trabado a toda la economía, y el acuerdo con los organismos internacionales”.
En respuesta a quienes plantean una solución que pase por el desarrollo de la producción y no el ajuste, Duhalde dijo estar “de acuerdo en la teoría”, pero se preguntó: “¿cómo lo hacemos?” y volvió a recordar que “el país está fundido”, o más aun, “refundido”.
Fuente: Diarios y Noticias
Duhalde dijo que habló con los titulares de ambas cámaras legislativas, José Luis Maqueda (Senado) y Dante Camaño (Diputados) para que aprueben el proyecto que, según reveló, ya envió al Congreso.
“La situación la conocemos. Hay mucha más gente que quiere cobrar que dinero en los bancos”, que calculó en 60.000 millones de dólares, y reiteró que estos fondos “los tienen prestados a 3 ó 4 años promedio. Si la gente va a sacarlo ahora, es imposible”, advirtió.
Por otra parte, el presidente manifestó que no piensa renunciar a su cargo y consideró que “no le conviene a nadie” su salida anticipada.
Además, señaló que “los que vengan, no sé si se animarán a tomar este barco en una situación tan difícil”.
“Yo tengo un mandato del Parlamento, si el Parlamento no está de acuerdo tendrá que elegir otro presidente”, sostuvo en Casa de Gobierno.
Asimismo, también reiteró su confianza hacia el titular del Palacio de Hacienda, Jorge Remes Lenicov, al calificarlo de “ministro de lujo”.
En otro orden, el primer mandatario afirmó que sería una “irresponsabilidad” de su parte llamar a elecciones adelantadas para jefe de Estado por considerar que esa alternativa sería “dejar al país a la deriva por cuatro meses”.
“Si la mayoría cree que ésa es la solución… a mí me parece que no es la solución. En medio de la turbulencia de la Argentina lo menos conveniente sería dejar el país a la deriva por cuatro meses.
Sería una irresponsabilidad de mi parte”, sostuvo en Casa de Gobierno, al ser consultado sobre la posibilidad de adelantar elecciones.
Por otro lado, Duhalde admitió que si se sigue retrasando el acuerdo con el FMI “deberemos demorar los festejos”, que prometió para el 9 de julio, ante una hipotética reactivación económica.
“Pensaba tener ahora un acuerdo. Cuanto más se demoran estos acuerdos, seguimos en terapia intensiva”, advirtió el jefe del Estado al formular declaraciones en Casa de Gobierno.
Duhalde reiteró que “los dos temas para pasar a terapia intermedia” son “la solución al corralito, que ha trabado a toda la economía, y el acuerdo con los organismos internacionales”.
En respuesta a quienes plantean una solución que pase por el desarrollo de la producción y no el ajuste, Duhalde dijo estar “de acuerdo en la teoría”, pero se preguntó: “¿cómo lo hacemos?” y volvió a recordar que “el país está fundido”, o más aun, “refundido”.
Fuente: Diarios y Noticias
