De la Rua no modificará gabinete

El presidente negó las especulaciones de varios sectores de la prensa y la política nacional sobre los supuestos cambios en las titularidades de los ministerios.

16 septiembre, 2000

Fernando De la Rúa reiteró ayer (viernes 15) su intención de no introducir cambios en su gabinete, al afirmar que mantendrá a sus ministros y exhortar a “no hacer especulaciones ni inquietudes” en ese sentido, tras arribar al país después de una gira de 11 días por el exterior.

En un mensaje que brindó en el aeropuerto de Ezeiza, a su llegada al país, De la Rúa volvió a descartar que tenga decidido cambiar a alguno de los ministros del gabinete nacional, como se especuló largamente durante toda la estadía en el exterior del mandatario y como consignaban versiones periodísticas.

“No hay cambios. Lo repito, como lo dije en el exterior, para que no haya especulaciones ni inquietudes durante todo el fin se semana”, enfatizó De la Rúa, rodeado de todos los integrantes del gabinete nacional, en un gesto con el que buscó despejar los rumores respecto a eventuales cambios a su llegada.

El mandatario mencionó al vicepresidente Alvarez en tres oportunidades durante su breve discurso, para agradecerle la gestión durante su ausencia.

El presidente arribó a bordo del Tango 01 al aeropuerto de Ezeiza a las 17.45, acompañado de su esposa Inés Pertiné y del canciller Adalberto Rodríguez Giavarini, y en la misma estación aérea recibió en primer lugar el saludo de sus nietos Sol y Simón, que lloraban en brazos de familiares.

“Había voces que decían que debía suspender este viaje. Pero ya ven: funcionaron las instituciones. La suspensión del viaje hubiera sido grave porque todos hubieran preguntado por qué”, aseguró De la Rúa, quien agradeció al vicepresidente Carlos Alvarez que “haya llevado las cosas con firmeza, manteniendo en alto la confianza de los argentinos”.

Alvarez, y los ministros de Educación, Juan Llach; de Desarrollo Social, Graciela Fernández Meijide; de Trabajo, Alberto Flamarique; de Interior, Federico Storani; de Defensa, Ricardo Lopez Murphy; y de Economía, José Luis Machinea; lo esperaban en el Salón de las Américas, un sector VIP del aeropuerto de Ezeiza.

También lo aguardaban los ministros de Salud, Héctor Lombardo; de Infraestructura, Nicolás Gallo; y de Justicia, Ricardo Gil Lavedra; y el jefe de Gabinete, Rodoldo Terragno, con quiénes mantuvo una reunión de aproximadamente 15 minutos.

En el mensaje que pronunció en la sala de embarque, donde lo aguardaban los periodistas, De la Rúa volvió a referirse a la crisis desatada en el Senado a raíz de los presuntos sobornos y llamó a “mantener una línea clara e inclaudicable de lucha contra la corrupción”.

Remarcó, en ese sentido, que “las instituciones son capaces de dar respuesta” a la crisis y destacó la “importancia” que el Congreso sesione, y reveló que tuvo “un seguimiento permanente” con el vicepresidente y los ministros de lo que acontecía en el Senado.

Fernando De la Rúa reiteró ayer (viernes 15) su intención de no introducir cambios en su gabinete, al afirmar que mantendrá a sus ministros y exhortar a “no hacer especulaciones ni inquietudes” en ese sentido, tras arribar al país después de una gira de 11 días por el exterior.

En un mensaje que brindó en el aeropuerto de Ezeiza, a su llegada al país, De la Rúa volvió a descartar que tenga decidido cambiar a alguno de los ministros del gabinete nacional, como se especuló largamente durante toda la estadía en el exterior del mandatario y como consignaban versiones periodísticas.

“No hay cambios. Lo repito, como lo dije en el exterior, para que no haya especulaciones ni inquietudes durante todo el fin se semana”, enfatizó De la Rúa, rodeado de todos los integrantes del gabinete nacional, en un gesto con el que buscó despejar los rumores respecto a eventuales cambios a su llegada.

El mandatario mencionó al vicepresidente Alvarez en tres oportunidades durante su breve discurso, para agradecerle la gestión durante su ausencia.

El presidente arribó a bordo del Tango 01 al aeropuerto de Ezeiza a las 17.45, acompañado de su esposa Inés Pertiné y del canciller Adalberto Rodríguez Giavarini, y en la misma estación aérea recibió en primer lugar el saludo de sus nietos Sol y Simón, que lloraban en brazos de familiares.

“Había voces que decían que debía suspender este viaje. Pero ya ven: funcionaron las instituciones. La suspensión del viaje hubiera sido grave porque todos hubieran preguntado por qué”, aseguró De la Rúa, quien agradeció al vicepresidente Carlos Alvarez que “haya llevado las cosas con firmeza, manteniendo en alto la confianza de los argentinos”.

Alvarez, y los ministros de Educación, Juan Llach; de Desarrollo Social, Graciela Fernández Meijide; de Trabajo, Alberto Flamarique; de Interior, Federico Storani; de Defensa, Ricardo Lopez Murphy; y de Economía, José Luis Machinea; lo esperaban en el Salón de las Américas, un sector VIP del aeropuerto de Ezeiza.

También lo aguardaban los ministros de Salud, Héctor Lombardo; de Infraestructura, Nicolás Gallo; y de Justicia, Ricardo Gil Lavedra; y el jefe de Gabinete, Rodoldo Terragno, con quiénes mantuvo una reunión de aproximadamente 15 minutos.

En el mensaje que pronunció en la sala de embarque, donde lo aguardaban los periodistas, De la Rúa volvió a referirse a la crisis desatada en el Senado a raíz de los presuntos sobornos y llamó a “mantener una línea clara e inclaudicable de lucha contra la corrupción”.

Remarcó, en ese sentido, que “las instituciones son capaces de dar respuesta” a la crisis y destacó la “importancia” que el Congreso sesione, y reveló que tuvo “un seguimiento permanente” con el vicepresidente y los ministros de lo que acontecía en el Senado.

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