De la Rúa no habla de reelección
El Presidente evitó referirse a las candidaturas para 2003, y se mostró molesto cuando le preguntaron sobre el tema. Adelantó que la semana que viene habrían más decretos y que la rebaja de impuestos para las automotrices no es viable en este momento.
El presidente Fernando de la Rúa dijo durante la apertura del Tercer Campeonato Mundial de Seven de Rugby, que comenzó ayer (viernes 26) en la ciudad de Mar del Plata, que “no hay que hablar de reelección ahora”, tratando de que quedará claro que para él no es oportuno para referirse a su eventual renovación de su cargo en 2003.
El primer mandatario argentino dialogó con la prensa en las instalaciones del apart hotel Manantiales, establecimiento en el que se realizó la inauguración del encuentro deportivo.
De la Rúa, intentando quizás bajar los decibeles que generaron las declaraciones de Raúl Alfonsín señalándolo como el candidato natural de la Alianza para los comicios de 2003, aseguró que la semana fue importante porque en ella “se vio la unidad” de la alianza coalición gobernante.
El Presidente trató de dejar en segundo plano todo personalismo y se dedicó a destacar la solidez de la Alianza, subrayando la importancia de la ronda de reuniones con Carlos Alvarez; el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, y el diputado frepasista Darío Alessandro, así como los encuentros que mantuvieron Alfonsín y el ministro del Interior, Federico Storani, con el ex vicepresidente.
“De esas reuniones -dijo- surgió la coincidencia de crear un grupo de trabajo para que mejore la comunicación entre los partidos, algo que yo había indicado como muy necesario.”
De la Rúa se refirió también a los 26 decretos que firmó esta semana y los justificó diciendo que no había firmado decretos de necesidad y urgencia sino que hizo uso de “la manera natural y normal que tiene el Poder Ejecutivo de procurar soluciones”.
De la Rúa dijo que el número de decretos fue normal y el revuelo mediático se debió más bien a que “se hizo públicamente y en un solo día.”
“Y la semana que viene serán varios más”, anticipó.
el mandatario se mostró fastidiado por los pedidos de los mandatarios de Buenos Aires y Córdoba, los justicialistas Carlos Ruckauf y José Manuel De la Sota, quienes hasta ayer insistían con una rebaja de los impuestos para la industria automotriz.
Y justificó su negativa argumentando que ambos gobernadores hicieron el pedido “sabiendo de antemano que no era viable”.
El presidente Fernando de la Rúa dijo durante la apertura del Tercer Campeonato Mundial de Seven de Rugby, que comenzó ayer (viernes 26) en la ciudad de Mar del Plata, que “no hay que hablar de reelección ahora”, tratando de que quedará claro que para él no es oportuno para referirse a su eventual renovación de su cargo en 2003.
El primer mandatario argentino dialogó con la prensa en las instalaciones del apart hotel Manantiales, establecimiento en el que se realizó la inauguración del encuentro deportivo.
De la Rúa, intentando quizás bajar los decibeles que generaron las declaraciones de Raúl Alfonsín señalándolo como el candidato natural de la Alianza para los comicios de 2003, aseguró que la semana fue importante porque en ella “se vio la unidad” de la alianza coalición gobernante.
El Presidente trató de dejar en segundo plano todo personalismo y se dedicó a destacar la solidez de la Alianza, subrayando la importancia de la ronda de reuniones con Carlos Alvarez; el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, y el diputado frepasista Darío Alessandro, así como los encuentros que mantuvieron Alfonsín y el ministro del Interior, Federico Storani, con el ex vicepresidente.
“De esas reuniones -dijo- surgió la coincidencia de crear un grupo de trabajo para que mejore la comunicación entre los partidos, algo que yo había indicado como muy necesario.”
De la Rúa se refirió también a los 26 decretos que firmó esta semana y los justificó diciendo que no había firmado decretos de necesidad y urgencia sino que hizo uso de “la manera natural y normal que tiene el Poder Ejecutivo de procurar soluciones”.
De la Rúa dijo que el número de decretos fue normal y el revuelo mediático se debió más bien a que “se hizo públicamente y en un solo día.”
“Y la semana que viene serán varios más”, anticipó.
el mandatario se mostró fastidiado por los pedidos de los mandatarios de Buenos Aires y Córdoba, los justicialistas Carlos Ruckauf y José Manuel De la Sota, quienes hasta ayer insistían con una rebaja de los impuestos para la industria automotriz.
Y justificó su negativa argumentando que ambos gobernadores hicieron el pedido “sabiendo de antemano que no era viable”.
