Considerable baja del número de pobres
Cerca de 1.700.000 personas dejarían de estar bajo la línea de pobreza como consecuencia de la reducción de precios de los productos que integran la canasta básica.
El INDEC dará a conocer el nivel de pobreza e indigencia en
Capital Federal y Gran Buenos Aires a fin de mes, pero ya
trascendieron algunos números, que están en manos del presidente
Néstor Kirchner.
La canasta básica de alimentos cayó a 103 pesos en junio, luego
de haber tocado un pico de casi 108 pesos en marzo pasado,
mientras que la canasta básica total, que incluye transporte, pasó
de 236 pesos en febrero a 228 pesos en junio pasado.
En consecuencia, un número mayor de personas puede ahora
acceder a la canasta básica, con lo cual “abandonan” la categoría
de “pobres”.
La última medición del INDEC, que data de octubre de 2002,
arrojó un nivel de pobreza que englobó al 57,5 por ciento de la
población, es decir, más de 20 millones de personas, un récord
histórico.
Además de la reducción de precios que se anotó en los últimos
meses, un menor número de pobres también es consecuencia de la
restitución del recorte del 13 por ciento a estatales y jubilados;
las subas salariales “no remunerativas” y la existencia de más
beneficiarios de los planes sociales.
El INDEC dará a conocer el nivel de pobreza e indigencia en
Capital Federal y Gran Buenos Aires a fin de mes, pero ya
trascendieron algunos números, que están en manos del presidente
Néstor Kirchner.
La canasta básica de alimentos cayó a 103 pesos en junio, luego
de haber tocado un pico de casi 108 pesos en marzo pasado,
mientras que la canasta básica total, que incluye transporte, pasó
de 236 pesos en febrero a 228 pesos en junio pasado.
En consecuencia, un número mayor de personas puede ahora
acceder a la canasta básica, con lo cual “abandonan” la categoría
de “pobres”.
La última medición del INDEC, que data de octubre de 2002,
arrojó un nivel de pobreza que englobó al 57,5 por ciento de la
población, es decir, más de 20 millones de personas, un récord
histórico.
Además de la reducción de precios que se anotó en los últimos
meses, un menor número de pobres también es consecuencia de la
restitución del recorte del 13 por ciento a estatales y jubilados;
las subas salariales “no remunerativas” y la existencia de más
beneficiarios de los planes sociales.
