La administración de Joe Biden se sumará a los esfuerzos globales por distribuir por todo el mundo las vacunas contra el Covid-19, revirtiendo la posición de su antecesor Donald Trump e inaugurando una nueva era de diplomacia sanitaria.
Anthony Fauci, jefe del National Institutes of Allergy and Infectious Diseases, dijo el jueves que Estados Unidos firmará el Programa Covax de la Organización Mundial de la Salud para llevar adelante los esfuerzos multilaterales por detener la propagación del coronavirus.
Al mismo tiempo que advirtió que el total de muestres por Covid en Estaos Unidos probablemente llegue a 500.000 el mes próximo, el presidente Biden prometió instruir a los organismos oficiales del país a usar poderes de guerra para aumentar el suministro de varios elemento, como tests para detectar coronavirus, tapabocas N95 y jeringas para vacunas.
Las medidas forman parte del primer intento de Biden por deshacer gran parte del legado de Trump (y su enfoque anti-ciencia) y de volver a dar a Estados Unidos una mirada más internacionalista, que también incluye su decisión del día 1 de volver a integrar el acuerdo del clima de París. Para el sector energético en particular, la entrada de Biden significa el comienzo de una nueva era.
El Congreso está listo para trabajar en la agenda de Biden. Nancy Pelosi dice que la Casa de Representantes estará completamente dispuesta a aprobar el paquete de ayuda por coronavirus de US$ 1.900 billones (millones de millones) para el primero de febrero. Dijo que los demócratas desean aprobar cuando antes el masivo paquete de estímulos.