CIA: panorama optimista para A. latina
La Central de Inteligencia prevé una etapa de recuperación económica y consolidación política para la mayoría de los países de la región. La inmigración en búsqueda de trabajo será un problema que irá incrementándose.
La prosperidad se hará presente en América latina en los próximos 15 años como resultado del comercio, la revolución informática y el descenso del índice de natalidad, pronostico la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos.
En el panorama mundial, el organismo estadounidense indica que ,durante los próximos 15 años, se mantendrán y en muchos casos se agudizarán los problemas ambientales debido al aumento en el consumo de energía y el crecimiento demográfico en los países en desarrollo.
El análisis, uno de los que la CIA prepara cada quinquenio, también augura que los gobiernos nacionales tendrán cada vez menos control sobre los flujos de información, la tecnología, las armas, las transacciones financieras y la inmigración legal e ilegal a través de sus fronteras.
Sobre América latina, indica que el afianzamiento de las instituciones democráticas dará mayor fuerza a la reforma y promoverá la prosperidad al mejorar la confianza de los inversionistas.
En este marco, la pauta será marcada por Brasil y México que serán los países que tendrán mayor voz en los asuntos de la región.
Sin embargo, el informe agrega que América latina no logrará despojarse de su vulnerabilidad ante las crisis financieras debido a su dependencia de los recursos externos y el papel persistente que desempeñan las exportaciones de una sola materia prima en algunas de sus economías.
Los países más débiles, en especial los de la región andina, seguirán rezagados y los problemas para las democracias serán exacerbados por el crimen, la corrupción, el tráfico de drogas y la insurgencia, pese a las demandas populares para eliminarlos.
El informe señala que Brasil se sumará a Venezuela y México como importante productor petrolero del continente y como miembro del grupo energético de la Cuenca Atlántica.
Principales catalizadores del crecimiento económico serán el comercio, la liberalización de las inversiones y la expansión de los acuerdos de intercambio dentro y fuera de América Latina, entre ellos el Mercosur y el Area de Libre Comercio de las Américas.
Sobre el futuro político del continente, el estudio señala que la democratización de Cuba dependerá de la forma y el momento en que el presidente Fidel Castro salga del primer plano. Agrega que durante el proceso de transición se produciría una importante inestabilidad política que llevaría a una emigración masiva.
En Argentina, Chile, México y Brasil la democracia seguirá consolidándose, pero en otros países la delincuencia, la corrupción, la pobreza y el fracaso de gobiernos en sus esfuerzos por resolver los problemas de la injusticia social creará “terreno fértil para el surgimiento de políticos populistas y autoritarios”.
En este proceso, según la CIA, la brecha que separa a los países más democráticos y prósperos de los demás seguirá aumentando y “los que no pueden o no estén dispuestos a reformar sus economías seguirán retrocediendo”.
El cansancio ante los rigores económicos y el descontento ante el desempeño de las instituciones públicas provocarán inestabilidad en Venezuela, Perú y Ecuador, y la resolución del problema de la guerrilla será elemento clave para las perspectivas colombianas, según agrega.
El informe pronostica también que la inmigración se convertirá en un problema de contención entre los países latinoamericanos y cita el caso de Argentina y Venezuela que tienen millones de trabajadores indocumentados procedentes de países limítrofes.
La prosperidad se hará presente en América latina en los próximos 15 años como resultado del comercio, la revolución informática y el descenso del índice de natalidad, pronostico la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos.
En el panorama mundial, el organismo estadounidense indica que ,durante los próximos 15 años, se mantendrán y en muchos casos se agudizarán los problemas ambientales debido al aumento en el consumo de energía y el crecimiento demográfico en los países en desarrollo.
El análisis, uno de los que la CIA prepara cada quinquenio, también augura que los gobiernos nacionales tendrán cada vez menos control sobre los flujos de información, la tecnología, las armas, las transacciones financieras y la inmigración legal e ilegal a través de sus fronteras.
Sobre América latina, indica que el afianzamiento de las instituciones democráticas dará mayor fuerza a la reforma y promoverá la prosperidad al mejorar la confianza de los inversionistas.
En este marco, la pauta será marcada por Brasil y México que serán los países que tendrán mayor voz en los asuntos de la región.
Sin embargo, el informe agrega que América latina no logrará despojarse de su vulnerabilidad ante las crisis financieras debido a su dependencia de los recursos externos y el papel persistente que desempeñan las exportaciones de una sola materia prima en algunas de sus economías.
Los países más débiles, en especial los de la región andina, seguirán rezagados y los problemas para las democracias serán exacerbados por el crimen, la corrupción, el tráfico de drogas y la insurgencia, pese a las demandas populares para eliminarlos.
El informe señala que Brasil se sumará a Venezuela y México como importante productor petrolero del continente y como miembro del grupo energético de la Cuenca Atlántica.
Principales catalizadores del crecimiento económico serán el comercio, la liberalización de las inversiones y la expansión de los acuerdos de intercambio dentro y fuera de América Latina, entre ellos el Mercosur y el Area de Libre Comercio de las Américas.
Sobre el futuro político del continente, el estudio señala que la democratización de Cuba dependerá de la forma y el momento en que el presidente Fidel Castro salga del primer plano. Agrega que durante el proceso de transición se produciría una importante inestabilidad política que llevaría a una emigración masiva.
En Argentina, Chile, México y Brasil la democracia seguirá consolidándose, pero en otros países la delincuencia, la corrupción, la pobreza y el fracaso de gobiernos en sus esfuerzos por resolver los problemas de la injusticia social creará “terreno fértil para el surgimiento de políticos populistas y autoritarios”.
En este proceso, según la CIA, la brecha que separa a los países más democráticos y prósperos de los demás seguirá aumentando y “los que no pueden o no estén dispuestos a reformar sus economías seguirán retrocediendo”.
El cansancio ante los rigores económicos y el descontento ante el desempeño de las instituciones públicas provocarán inestabilidad en Venezuela, Perú y Ecuador, y la resolución del problema de la guerrilla será elemento clave para las perspectivas colombianas, según agrega.
El informe pronostica también que la inmigración se convertirá en un problema de contención entre los países latinoamericanos y cita el caso de Argentina y Venezuela que tienen millones de trabajadores indocumentados procedentes de países limítrofes.
