China prometió reducir la influencia de las compañías tecnológicas y extirpar la corrupción que viene asociada a la expansión “desordenada” del capital, en una señal de que las autoridades podrían incrementar la presión regulatoria que el año pasado evaporó más de un billón de dólares.
En un comunicado dado a conocer luego de la sesión plenaria del Partido Comunista Chino la agencia de noticias oficial Xinhua difundió que el gobierno está dispuesto a quebrar la relación entre dinero y poder y que atacará la corrupción en una serie de industrias. También prometió apuntarle a facciones políticas y grupos de interés dentro del partido.
En el comunicado la Comisión Central de Inspección Disciplinaria dijo que “se realizarán esfuerzos para investigar y castigar las conductas corruptas detrás de la desordenada expansión de los monopolios de capital y plataformas y para “cortar el lazo entre poder y capital”. “No habrá clemencia con aquellos que se involucren en bandas políticas, pequeños círculos y grupos de interés dentro del partido”.
El comentario sugiere que el gobierno de Xi Jinping aun no ha terminado con un asalto regulatorio que redujo a todo tipo de industrias el año pasado. En coincidencia con el anuncio el grupo Alibaba registró el viernes una caía de 3,4% en la bolsa de Hong Kong.