China: la inflación alcanza un máximo en once años

En noviembre, el índice de precios minoristas marcó un avance de 6,9% desde diciembre anterior. Eso no ocurría desde 1996. Junto con el alza del superávit comercial, se da un cuadro de recalentamiento.

12 diciembre, 2007

Poco antes de difundir esas cifras, el gobierno endureció normas para préstamos hipotecarios –residenciales y comerciales-, mientras disponía que las empresas estatales pagasen dividendos. Al mismo tiempo, se informaba que el excedente del intercambio exterior había llegado a US$ 238.000 millones en enero-noviembre.

Casualmente, Henry Paulson –secretario norteamericano de hacienda- visitaba de nuevo Beijing para lo desiempre: presionar por una repreciación más acentuada del yüan, para frenar el superávit comercial. Nadie se explica para qué tanta asiduidad que no depara resultados concretos.

No obstante, varios funcionarios admiten que la acumulación de excedentes crea una peligrosa sobreliquidez en el sistema económico interno. Pero, señalan en Hongkong, “Paulson sigue procediendo como hombre de Goldman Sachs, una firma que nunca ha entendido la mentalidad china”.

Sin embargo, el dólar alcanzaba este martes pisos de 7,377 yüan. Ello significa una depreciación de 12% desde julio de 2005, cuando se descongeló la paridad. Dejando de lado la terminología inversa de los medios anglosajones, quiere decir que el dólar roza 0,1355 yüan.

La autoridad monetaria china difundió instrucciones a los bancos para restringir el financiamiento a la compra de viviendas y locales urbanos. Al respecto, el emisor destaca “la proliferación de burbujas inmobilarias en Asia oriental, sudoriental, Estados Unidos y otras economías occidentales”. Una inflación superior al rinde de plazos fijos “fomenta especulaciones con bienes raíces. Los precios han saltado 9,5% en noviembre de 2006-octubre pasado en setenta ciudades”.

Poco antes de difundir esas cifras, el gobierno endureció normas para préstamos hipotecarios –residenciales y comerciales-, mientras disponía que las empresas estatales pagasen dividendos. Al mismo tiempo, se informaba que el excedente del intercambio exterior había llegado a US$ 238.000 millones en enero-noviembre.

Casualmente, Henry Paulson –secretario norteamericano de hacienda- visitaba de nuevo Beijing para lo desiempre: presionar por una repreciación más acentuada del yüan, para frenar el superávit comercial. Nadie se explica para qué tanta asiduidad que no depara resultados concretos.

No obstante, varios funcionarios admiten que la acumulación de excedentes crea una peligrosa sobreliquidez en el sistema económico interno. Pero, señalan en Hongkong, “Paulson sigue procediendo como hombre de Goldman Sachs, una firma que nunca ha entendido la mentalidad china”.

Sin embargo, el dólar alcanzaba este martes pisos de 7,377 yüan. Ello significa una depreciación de 12% desde julio de 2005, cuando se descongeló la paridad. Dejando de lado la terminología inversa de los medios anglosajones, quiere decir que el dólar roza 0,1355 yüan.

La autoridad monetaria china difundió instrucciones a los bancos para restringir el financiamiento a la compra de viviendas y locales urbanos. Al respecto, el emisor destaca “la proliferación de burbujas inmobilarias en Asia oriental, sudoriental, Estados Unidos y otras economías occidentales”. Una inflación superior al rinde de plazos fijos “fomenta especulaciones con bienes raíces. Los precios han saltado 9,5% en noviembre de 2006-octubre pasado en setenta ciudades”.

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades