Cavallo hizo propuestas
Ante empresarios y diplomáticos Domingo Cavallo propuso metas de crecimiento de 7% y hasta 10% para el país. Flotó la impresión de que se postulaba para presidir un proyecto económico.
En un almuerzo organizado por el Club de la Unión Nacional, Domingo Cavallo consideró insuficientes las proyecciones de crecimiento de 5,7% anunciadas por el ministro de Economía, José Luis Machinea, y propuso que el país se fije metas más ambiciosas.
Estimó que la Argentina debe crecer sostenidamente a tasas de 7% anual en el corto plazo, para integrarse a los países desarrollados, para lo cual, entre otras medidas, convocó a eliminar transitoriamente los impuestos a la inversión.
De esta manera, aventuró la perspectiva de que se pueda llegar, incluso, a un crecimiento anual de 10%.
Afirmó, asimismo, que el Gobierno ha dado pasos muy importantes al acordar un pacto fiscal que congela el gasto público de las provincias hasta el 2005, aunque objetó el aumento de impuestos destinado a cubrir el déficit del tesoro, que provocó un aletargamiento de las expectativas de reactivación económica.
Los empresarios y diplomáticos presentes prestaron especial atención a sus palabras cuando estimó que es posible vincular el peso a una canasta de monedas, pero aclarando a la vez que no es el actual el momento más oportuno para hacerlo.
Flotó en la concurrencia la impresión de que Cavallo enviaba una suerte de mensaje subliminal al país, ofreciéndose para presidir un proyecto económico de crecimiento.
Frente a las versiones sobre inminentes cambios en el entorno presidencial, el vocero Ricardo Ostuni, afirmó que se realizarán modificaciones estructurales pero que no habrá cambios de nombres.
En un almuerzo organizado por el Club de la Unión Nacional, Domingo Cavallo consideró insuficientes las proyecciones de crecimiento de 5,7% anunciadas por el ministro de Economía, José Luis Machinea, y propuso que el país se fije metas más ambiciosas.
Estimó que la Argentina debe crecer sostenidamente a tasas de 7% anual en el corto plazo, para integrarse a los países desarrollados, para lo cual, entre otras medidas, convocó a eliminar transitoriamente los impuestos a la inversión.
De esta manera, aventuró la perspectiva de que se pueda llegar, incluso, a un crecimiento anual de 10%.
Afirmó, asimismo, que el Gobierno ha dado pasos muy importantes al acordar un pacto fiscal que congela el gasto público de las provincias hasta el 2005, aunque objetó el aumento de impuestos destinado a cubrir el déficit del tesoro, que provocó un aletargamiento de las expectativas de reactivación económica.
Los empresarios y diplomáticos presentes prestaron especial atención a sus palabras cuando estimó que es posible vincular el peso a una canasta de monedas, pero aclarando a la vez que no es el actual el momento más oportuno para hacerlo.
Flotó en la concurrencia la impresión de que Cavallo enviaba una suerte de mensaje subliminal al país, ofreciéndose para presidir un proyecto económico de crecimiento.
Frente a las versiones sobre inminentes cambios en el entorno presidencial, el vocero Ricardo Ostuni, afirmó que se realizarán modificaciones estructurales pero que no habrá cambios de nombres.
