Brasil critica a la Argentina
El conflicto entre los socios del Mercosur continuó hoy con las declaraciones de Botafogo Gonçalves, quien considera que la devaluación del real no afecta a la economía argentina, y estudia aplicar represalias en el ámbito automotriz.
(NA). – El embajador brasileño para el Mercosur, José Botafogo Gonçalves, aseguró esta mañana (miércoles 19) que “es falso que la devaluación del real esté causando perjuicios a la Argentina”, y aclaró que la posibilidad de tomar represalias “es parte del acuerdo” automotor que firmaron ambos países y que permite que “estemos manteniendo miles de puestos de empleo en ese sector argentino”.
“Es falsa la idea de que estamos causando un grave perjuicio a raíz de la devaluación del real, porque en el tema automotriz y de las importaciones considerables de autos de producción argentina utilizamos el mecanismo de intercambio compensado, y está totalmente afuera del tema cambiario”, afirmó el embajador brasileño.
En declaraciones a radio América formuladas esta mañana, Botafogo Gonçalves aseguró que desde Brasil “importamos autos aunque sean más caros, con lo cual en una parte importante del intercambio el tema cambiario no causa perjuicios”.
Al contrario, según destacó el funcionario, con ese acuerdo “estamos manteniendo miles de puestos de empleo en la industria automotriz argentina”.
El embajador brasileño se quejó por ese motivo, por el tratamiento que recibe de parte de los funcionarios argentinos a través de la prensa, y calificó a la actitud como “muy poco educada”. En ese sentido, dijo que a su entender “Brasil ha dado todo su apoyo para la reactivación de la economía Argentina”.
El conflicto entre los dos socios mayoritarios del Mercosur se reavivó en las últimas semanas, cuando a raíz de las sucesivas devaluaciones del real, el ministro de Economía, Domingo Cavallo, comenzó con una ofensiva que incluyó desde advertencias de replantear la relación comercial hasta la reinstauración de reintegros a las exportaciones.
El malestar brasileño no tardó en llegar, y primero el ministro de Economía de ese país, Pedro Malán, consideró que Cavallo se había “pasado de la raya”, mientras que ayer Botafogo Gonçalves amenazó con establecer represalias comerciales contra la Argentina ante la “política proteccionista” de Cavallo que, según dijo, “llegó al límite de lo tolerable”.
No obstante, al ser consultado sobre por qué Brasil habla de aplicar represalias en el ámbito automotriz, el funcionario brasileño respondió que no es así. “El Pacto Automotor está funcionando, fue negociado y hemos acordado las solicitudes principales de Argentina porque la producción que queríamos nosotros era de libre comercio en el sector automotor, pero entendimos que podría traer muchos perjuicios al sector automotriz y por ese motivo decidimos aceptar las propuestas de la Argentina”, explicó.
En cuanto a la multa de US$ 100 millones que pretendería aplicar Brasil por el supuesto incumplimiento de ese pacto, el embajador brasileño ante el bloque dijo que “eso es parte del acuerdo, y yo no estudio nada”.
“El acuerdo dice que una parte no puede vender este año más de 10% de lo que debe a la otra, todo lo que pasa tiene que compensarse con una tarifa especial el año próximo; esta regla parte del acuerdo, no es mía y fue solicitada por la parte argentina”, reiteró.
Añadió que “las importadoras brasileñas tendrán que pagar el año próximo multas muy elevadas o tendrán la alternativa de cesar las importaciones de autos argentinos. No dije nada que no esté escrito en el acuerdo por exigencia argentina y por lo tanto no tomo represalias de ningún tipo”.
Botafogo Gonçalves aseguró además que “no hacemos la vista gorda”, porque las reglas del acuerdo “sólo se aplican a partir del próximo año”.
El funcionario enfatizó también que “no son posibles las exigencias de un socio para que el otro modifique su política de cambio y deba adaptarse a la suya. Eso no es posible”.
“Nosotros llegamos a la conclusión de que el cambio fluctuante es la mejor alternativa para Brasil, Chile también lo tiene y hay muchos otros países que también lo tienen. Entonces el argumento de que dos tipos de cambio en la misma zona no funcionan, no es verdad”, dijo.
Consideró que lo que está pasando es que hay una coyuntura económica “difícil” de capitales en el mundo que tiene consecuencias “más graves sobre la economía argentina que sobre la brasileña”.
“Vamos a hablar claramente: Buscar que la economía más grande se adapte a la política de la más chica no es un propuesta muy razonable”, argumentó.
Por otra parte, el embajador estimó que “las amenazas de represalias comerciales si el cambio no se ajusta al gusto de una parte, tampoco es una medida constructiva”.
(NA). – El embajador brasileño para el Mercosur, José Botafogo Gonçalves, aseguró esta mañana (miércoles 19) que “es falso que la devaluación del real esté causando perjuicios a la Argentina”, y aclaró que la posibilidad de tomar represalias “es parte del acuerdo” automotor que firmaron ambos países y que permite que “estemos manteniendo miles de puestos de empleo en ese sector argentino”.
“Es falsa la idea de que estamos causando un grave perjuicio a raíz de la devaluación del real, porque en el tema automotriz y de las importaciones considerables de autos de producción argentina utilizamos el mecanismo de intercambio compensado, y está totalmente afuera del tema cambiario”, afirmó el embajador brasileño.
En declaraciones a radio América formuladas esta mañana, Botafogo Gonçalves aseguró que desde Brasil “importamos autos aunque sean más caros, con lo cual en una parte importante del intercambio el tema cambiario no causa perjuicios”.
Al contrario, según destacó el funcionario, con ese acuerdo “estamos manteniendo miles de puestos de empleo en la industria automotriz argentina”.
El embajador brasileño se quejó por ese motivo, por el tratamiento que recibe de parte de los funcionarios argentinos a través de la prensa, y calificó a la actitud como “muy poco educada”. En ese sentido, dijo que a su entender “Brasil ha dado todo su apoyo para la reactivación de la economía Argentina”.
El conflicto entre los dos socios mayoritarios del Mercosur se reavivó en las últimas semanas, cuando a raíz de las sucesivas devaluaciones del real, el ministro de Economía, Domingo Cavallo, comenzó con una ofensiva que incluyó desde advertencias de replantear la relación comercial hasta la reinstauración de reintegros a las exportaciones.
El malestar brasileño no tardó en llegar, y primero el ministro de Economía de ese país, Pedro Malán, consideró que Cavallo se había “pasado de la raya”, mientras que ayer Botafogo Gonçalves amenazó con establecer represalias comerciales contra la Argentina ante la “política proteccionista” de Cavallo que, según dijo, “llegó al límite de lo tolerable”.
No obstante, al ser consultado sobre por qué Brasil habla de aplicar represalias en el ámbito automotriz, el funcionario brasileño respondió que no es así. “El Pacto Automotor está funcionando, fue negociado y hemos acordado las solicitudes principales de Argentina porque la producción que queríamos nosotros era de libre comercio en el sector automotor, pero entendimos que podría traer muchos perjuicios al sector automotriz y por ese motivo decidimos aceptar las propuestas de la Argentina”, explicó.
En cuanto a la multa de US$ 100 millones que pretendería aplicar Brasil por el supuesto incumplimiento de ese pacto, el embajador brasileño ante el bloque dijo que “eso es parte del acuerdo, y yo no estudio nada”.
“El acuerdo dice que una parte no puede vender este año más de 10% de lo que debe a la otra, todo lo que pasa tiene que compensarse con una tarifa especial el año próximo; esta regla parte del acuerdo, no es mía y fue solicitada por la parte argentina”, reiteró.
Añadió que “las importadoras brasileñas tendrán que pagar el año próximo multas muy elevadas o tendrán la alternativa de cesar las importaciones de autos argentinos. No dije nada que no esté escrito en el acuerdo por exigencia argentina y por lo tanto no tomo represalias de ningún tipo”.
Botafogo Gonçalves aseguró además que “no hacemos la vista gorda”, porque las reglas del acuerdo “sólo se aplican a partir del próximo año”.
El funcionario enfatizó también que “no son posibles las exigencias de un socio para que el otro modifique su política de cambio y deba adaptarse a la suya. Eso no es posible”.
“Nosotros llegamos a la conclusión de que el cambio fluctuante es la mejor alternativa para Brasil, Chile también lo tiene y hay muchos otros países que también lo tienen. Entonces el argumento de que dos tipos de cambio en la misma zona no funcionan, no es verdad”, dijo.
Consideró que lo que está pasando es que hay una coyuntura económica “difícil” de capitales en el mundo que tiene consecuencias “más graves sobre la economía argentina que sobre la brasileña”.
“Vamos a hablar claramente: Buscar que la economía más grande se adapte a la política de la más chica no es un propuesta muy razonable”, argumentó.
Por otra parte, el embajador estimó que “las amenazas de represalias comerciales si el cambio no se ajusta al gusto de una parte, tampoco es una medida constructiva”.
