jueves, 26 de diciembre de 2024

Balza otra vez amenazado

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El ex jefe del ejército recibió el viernes pasado un sobre, con un mensaje escrito y el dibujo de un féretro, en el que se lo acusa de “culpar a los ex ministros” de Carlos Menem por el desvío de armas a Ecuador y Croacia.

(EFE).- El ex jefe del Ejército argentino Martín Balza, investigado por su presunta relación con contrabando de armas a Ecuador y Croacia, recibió una amenaza anónima que le acusa de incriminar a antiguos ministros en el escándalo.

Balza recibió el viernes un sobre en su casa con un mensaje en el que se le critica por “culpar a ex ministros” en el caso del contrabando de armamento argentino entre 1991 y 1995, y donde aparece dibujado un féretro, informó ayer (domingo 29) la agencia de noticias DyN.

El fiscal Carlos Stornelli, asignado al caso del contrabando de armas, ha pedido que el teniente general retirado preste declaración por su supuesta participación en la organización de una asociación ilícita que desvió armas a Ecuador y Croacia, cuando los destinos oficiales de los mismos eran Venezuela y Panamá, respectivamente.

Stornelli también ha citado para que preste declaración indagatoria el ex presidente Carlos Menem (1989-1999). El juez que lleva el caso decidirá si ambos prestan esta declaración y, en caso de que lo hagan, si existen razones para una acusación formal y el consiguiente proceso.

La agencia DyN informó ayer (domingo 29) que la esposa de Balza fue quien abrió el sobre en cuyo interior encontró una hoja con un texto que decía: “Balza habla de mafias y culpa a ex ministros”.

Al pie figura la imagen de un féretro, mientras que en la parte posterior, en idioma portugués, está el croquis de un féretro.

El ex jefe del Ejército argentino, quien ya fue procesado por el juez Jorge Urso por haber participado supuestamente en la venta ilegal de armas a Ecuador en 1995, ha recibido amenazas otras veces, mediante intimidaciones telefónicas y ataques a su vehículo.

Además de Martín Balza, el juez Urso ha procesado hasta ahora al ex canciller Guido di Tella y los ex ministros de Defensa Oscar Camilión y Antonio Erman González, todos ellos firmantes de los decretos de Carlos Menem que autorizaban las ventas de armas a Panamá y Venezuela, países que no llegaron a recibir el envío.

Los ex ministros fueron imputados de “falsedad ideológica” e incumplimiento de sus deberes como funcionarios.

También están procesados el empresario Emir Yoma, ex cuñado y antiguo colaborador de Menem, y el antiguo director de la empresa estatal Fabricaciones Militares Luis Sarlenga.

Balza niega estar implicado en el contrabando y ha afirmado que el fiscal Stornelli le tiene una “profunda animadversión”.

“Yo he sido sometido desde hace varios años a una mortificante acción”, sostuvo.

Afirmó que el armamento que fue a parar a Croacia durante la guerra en la antigua Yugoslavia y el que terminó en Ecuador, cuando ese país libraba una guerra no declarada con Perú por una zona limítrofe, no salió “irregularmente del Ejército y comprobarlo demanda menos de 24 horas”.

En ambos casos, las armas argentinas fueron desviadas cuando regían embargos dispuestos por las Naciones Unidas y cuando la Argentina era uno de los cuatro países garantes de un acuerdo de paz entre Ecuador y Perú.

(EFE).- El ex jefe del Ejército argentino Martín Balza, investigado por su presunta relación con contrabando de armas a Ecuador y Croacia, recibió una amenaza anónima que le acusa de incriminar a antiguos ministros en el escándalo.

Balza recibió el viernes un sobre en su casa con un mensaje en el que se le critica por “culpar a ex ministros” en el caso del contrabando de armamento argentino entre 1991 y 1995, y donde aparece dibujado un féretro, informó ayer (domingo 29) la agencia de noticias DyN.

El fiscal Carlos Stornelli, asignado al caso del contrabando de armas, ha pedido que el teniente general retirado preste declaración por su supuesta participación en la organización de una asociación ilícita que desvió armas a Ecuador y Croacia, cuando los destinos oficiales de los mismos eran Venezuela y Panamá, respectivamente.

Stornelli también ha citado para que preste declaración indagatoria el ex presidente Carlos Menem (1989-1999). El juez que lleva el caso decidirá si ambos prestan esta declaración y, en caso de que lo hagan, si existen razones para una acusación formal y el consiguiente proceso.

La agencia DyN informó ayer (domingo 29) que la esposa de Balza fue quien abrió el sobre en cuyo interior encontró una hoja con un texto que decía: “Balza habla de mafias y culpa a ex ministros”.

Al pie figura la imagen de un féretro, mientras que en la parte posterior, en idioma portugués, está el croquis de un féretro.

El ex jefe del Ejército argentino, quien ya fue procesado por el juez Jorge Urso por haber participado supuestamente en la venta ilegal de armas a Ecuador en 1995, ha recibido amenazas otras veces, mediante intimidaciones telefónicas y ataques a su vehículo.

Además de Martín Balza, el juez Urso ha procesado hasta ahora al ex canciller Guido di Tella y los ex ministros de Defensa Oscar Camilión y Antonio Erman González, todos ellos firmantes de los decretos de Carlos Menem que autorizaban las ventas de armas a Panamá y Venezuela, países que no llegaron a recibir el envío.

Los ex ministros fueron imputados de “falsedad ideológica” e incumplimiento de sus deberes como funcionarios.

También están procesados el empresario Emir Yoma, ex cuñado y antiguo colaborador de Menem, y el antiguo director de la empresa estatal Fabricaciones Militares Luis Sarlenga.

Balza niega estar implicado en el contrabando y ha afirmado que el fiscal Stornelli le tiene una “profunda animadversión”.

“Yo he sido sometido desde hace varios años a una mortificante acción”, sostuvo.

Afirmó que el armamento que fue a parar a Croacia durante la guerra en la antigua Yugoslavia y el que terminó en Ecuador, cuando ese país libraba una guerra no declarada con Perú por una zona limítrofe, no salió “irregularmente del Ejército y comprobarlo demanda menos de 24 horas”.

En ambos casos, las armas argentinas fueron desviadas cuando regían embargos dispuestos por las Naciones Unidas y cuando la Argentina era uno de los cuatro países garantes de un acuerdo de paz entre Ecuador y Perú.

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