Esta conservadora y ferviente católica ganó las elecciones del partido para convertirse en la líder de los demócrata-cristianos de Alemania. Eso la coloca en posición de convertirse en la próxima canciller de Alemania y en la figura política más poderosa de Europa.
Emocionada con su triunfo prometió dar nuevo impulso al partido para recuperar los millones de votos que perdió frente a los populistas de derecha y los Verdes en los últimos años.
Apodada “la mini-Merkel” (un título que está decidida a sacarse de encima) Kramp-Karrenbauer no fue respaldada abiertamente por la canciller pero claramente era su favorita al haberla promocionado a secretaria general del partido en febrero. Como resultado de esta elección se ve ahora como más posible que Merkel pueda completar su cuarto término como canciller hasta 2021. Ella ha expresado su decisión a permanecer como canciller durante los tres años que restan de su mandato y 56% de los alemanes apoyan esa decisión, según las encuestas.
Kramp-Karrenbauer ganó en las dos rondas de votacionessss. La primera con 450 votos (45%) y en la segunda con 517. La votación terminó una dura batalla que comenzó a fines de octubre cuando Merkel anunció que se bajaba de la presidencia del partido pero tenía intenciones de continuar como canciller hasta las próximas elecciones.
Merz, de 63 años, es un abogado especializado en economía que en 2002 fue desplazado como líder parlamentario del CDU por Merkel. Obtuvo 392 votos en la primera ronda y 482 en la segunda.
Abandonando un alto cargo en el negocio bancario, volvió al partido insistiendo que podría recuperar los votantes perdidos al populismo de derecha.
Sus simpatizantes dicen que habría sido una opción más valerosa porque estaba decidido a alejar al partido del centro, donde Merkel lo había mantenido con firmeza durante sus 18 años en el timón.
Esta votación marca una nueva era para el partido, fundado en 1945, de donde han salido durante 50 años los cancilleres del país.
AKK, como se la conoce debido a la dificultad de pronunciar su doble apellido, es vista ahora como la posible futura canciller si el CDU gana las elecciones de 2021.
El tercer candidato de la contienda, Jens Spahn, un joven de 38 años, se negó a retirar su candidatura a pesar de las presiones de sus coleghas en el partido cuando estuvo claro que era débil el apoyo a su persona. Nombrado hace seis meses ministro de salud en el gobierno de Merkel, se lo había considerado durante varios años como el candidato a suceder a Merkel pero fue hecho a un lado cuando merz decidió entrar al ring y consiguió el apoyo de los peso pesados del partido.
Spahn consiguió 175 votos en la primera ronda y no obtuvo la posibilidad de pasar a la segunda.