Amenazan con ampliar el paro sindical automotriz en EE.UU.
El sindicato United Auto Workers, que está en huelga contra General Motors, Ford y Stellantis y que por primera vez en su historia golpea a los tres fabricantes al mismo tiempo, amenaza con extender el paro a otras plantas si no reciben mejores propuestas.
La huelga se produjo después de que el sindicato hiciera demandas ambiciosas en materia de salarios, beneficios y protección laboral para sus miembros.
El sindicato intenta recuperar muchos beneficios a los que los trabajadores se habían visto obligados a renunciar hace más de una década cuando las empresas carecían de efectivo y estaban al borde de la quiebra. Pero en este momento los tres fabricantes de automóviles están reportando ganancias récord o casi récord.
Los miembros de la UAW dicen que el acuerdo salarial con Ford, GM y Stellantis se demora demasiado y advierten que si las empresas no presentan mejores propuestas salariales, podrían decidir extender el paro simultáneo que afecta desde el viernes pasado a tres plantas de automóviles en Misuri, Ohio y Michigan.
El presidente de la UAW, Shawn Fain, dijo el lunes que las automotrices están demorando las negociaciones y que los sindicatos no lo van a tolerar.
“Si no recibimos mejores ofertas (…) vamos a amplificar esto aún más. General Motors, Ford y Stellantis ‘no tienen excusa’ para no resolver los conflictos salariales dados sus enormes beneficios de los últimos años”, señaló.
“Estamos rezagados desde hace décadas”, añadió, y explicó que los trabajadores que representa “están hartos”.
Desde el viernes están paradas tres plantas: una de General Motors en Wentzville (Misuri), otra de Stellantis en Toledo (Ohio) y una filial de Ford en Wayne (Michigan).
La UAW reclama mejores salarios para los casi150.000 obreros que trabajan en las tres compañías. La campaña forma parte de una batalla más grande para proteger a los trabajadores durante la transición hacia los vahículos eléctricos , que según el sindicato, podría costar 35.000 puestos de trabajo.
El conflicto abarca a 12.700 de los 150.000 afiliados al UAW que trabajan en estas compañías. Nunca hasta ahora había habido una huelga simultáneamente en las tres empresas.
