“Yo pienso inmediatamente en las instituciones democráticas”, dice Daniel Schrag, director del Center for the Environment de Harvard. “Me preocupa la profunda corrupción en todos los niveles, incluido el Departamento de Justicia”. Sobre el cambio cIimático específicamente dicen que no hay nuevas políticas y que las viejas están condenadas. El calentamiento seguirá acelerándose y se acaba el plazo para evitar niveles extremadamente peligrosos.
Cuatro años más de administración Trump permitirán a la Casa Blanca imponer muchos repliegues ambientales que ya está comenzó a implantar, que involucran a casi todas las grandes herramientas federales para reducir las emisiones climáticas. La muy larga lista de políticas que la administración ha intentado debilitar o revertir incluyen las reglamentaciones que exigen a las compañías de petróleo, gas y de relleno de tierras que impidan filtraciones de metano y también la posibilidad de que estados como California impongan reglas por su cuenta. Serían otros cuatro años para amordazar o echar a los científicos de los organismos federales y reemplazarlos con personal pro-industria.
Estados Unidos contribuye directamente con cerca de 14% de las emisiones totales de combustibles fósiles. Pero la reelección podría tener efectos más amplios sobre lo que hace o o deja de hacer el mundo entero sobre del cambio climático.
