La Fuerza Espacial de Estados Unidos adjudicó a Boeing un contrato por US$ 2.800 millones para fabricar dos satélites del programa Evolved Strategic Satellite Communications (ESS), parte nuclear del sistema NC3. La compañía tendrá la opción de construir dos satélites más, y la entrega del primero está prevista para 2031.
Desarrollo del programa
El ESS reemplaza próximamente a la constelación Advanced Extremely High Frequency, con mejoras en capacidad, flexibilidad, fiabilidad y resistencia frente a interferencias e intercepciones. Los satélites operarán desde órbita geoestacionaria (~35.700 km), brindando cobertura continua a fuerzas estratégicas globales.
Desde 2020, Boeing desarrolló tecnologías avanzadas —basadas en los satélites WGS‑11 y WGS‑12— y las evaluó conjuntamente con la constelación comercial O3b mPOWER. Según la compañía, esta experiencia reduce riesgos y demuestra una madurez tecnológica de bajo perfil para el gobierno
Declaraciones institucionales
Cordell DeLaPena, director de Comunicaciones Militares de la Fuerza Espacial, sostuvo que “Es un momento crucial para impulsar las capacidades espaciales de EE. UU. y asegurar la paz mediante la fuerza”.
Por su parte Kay Sears, responsable de Boeing Space, Intelligence and Weapon Systems, añadió: “Diseñamos un sistema innovador para proporcionar una comunicación garantizada y atender un entorno de amenazas en evolución”
Michelle Parker, desde Boeing Space Mission Systems, destacó las inversiones en talento y producción para iniciar operaciones desde el primer día.
Contexto estratégico
El ESS forma parte de una modernización integral del sistema NC3 (nuclear, comando, control y comunicaciones), considerada esencial en la disuasión estratégica estadounidense. Se enmarca dentro del enfoque “arquitectura familiar” por fases de la Space Systems Command, que prevé entrega de capacidades iniciales y expansión posterior
Además, se prevé que el programa total ESS alcance costos aproximados de US$ 12.000 millones, incluyendo la integración de funciones como comunicaciones en el Ártico .
Implicancias y desafíos
– El desarrollo del ESS representa una integración de tecnologías militares y comerciales, elevando la resiliencia frente a ataques cibernéticos o electromagnéticos.
– El calendario, con entrega en 2031, abre interrogantes sobre los plazos frente a la creciente amenaza en el espacio, donde actores hostiles avanzan en capacidades disruptivas.
– La opción de adquirir dos satélites adicionales permitirá ampliar cobertura o reforzar redundancias, pero requerirá nuevos compromisos presupuestarios en los próximos años.
Este contrato refuerza el liderazgo de Boeing en sistemas satelitales de misión crítica y marca un paso importante en la evolución de la arquitectura NC3, central para la estrategia de disuasión de EE. UU.












