Los trabajadores del fabricante surcoreano Hyundai realizaron el jueves la segunda jornada de paro en solidaridad con sus compañeros de Daewoo, que llevan igualmente a cabo una huelga en protesta por la presunta venta de los activos de la empresa a una firma extranjera, dentro de la subasta restringida organizada por el Ejecutivo de Corea del Sur que se realizará en los próximos meses.
“Todas las líneas de producción pararon de nuevo”, explicó Kim Hyun-Sik, dirigente del principal sindicato de la planta de Hyundai en la localidad de Ulsan. “Las actividades en otras áreas, como ventas y servicio postventa, se han interrumpido igualmente en todo el país tras un acuerdo de los sindicatos”, añadió Kim, quien señaló que el paro de los trabajadores de Hyundai ha paralizado también otras plantas más pequeñas que la de Ulsan, como las de Asan y Chonju.
Asimismo, más de 20.000 trabajadores del fabricante Kia, filial de Hyundai, podrían unirse el viernes a la huelga, según indicó el dirigente del sindicato de trabajadores del Metal en Corea del Sur, Yu Chang-Hyun, quien anunció que “a menos que el Ejecutivo desestime su propuesta de vender Daewoo a una firma extranjera, la huelga se prolongará más allá de los 13 días que han previsto las organizaciones de trabajadores de Daewoo”.
Los huelguistas de Daewoo reclaman la nacionalización de la compañía surcoreana, ya que Hyundai tiene “mínimas posibilidades” (según el Gobierno de este país asiático) de equiparar su oferta a las de Ford, DaimlerChrysler, General Motors y Fiat.
Los trabajadores del fabricante surcoreano Hyundai realizaron el jueves la segunda jornada de paro en solidaridad con sus compañeros de Daewoo, que llevan igualmente a cabo una huelga en protesta por la presunta venta de los activos de la empresa a una firma extranjera, dentro de la subasta restringida organizada por el Ejecutivo de Corea del Sur que se realizará en los próximos meses.
“Todas las líneas de producción pararon de nuevo”, explicó Kim Hyun-Sik, dirigente del principal sindicato de la planta de Hyundai en la localidad de Ulsan. “Las actividades en otras áreas, como ventas y servicio postventa, se han interrumpido igualmente en todo el país tras un acuerdo de los sindicatos”, añadió Kim, quien señaló que el paro de los trabajadores de Hyundai ha paralizado también otras plantas más pequeñas que la de Ulsan, como las de Asan y Chonju.
Asimismo, más de 20.000 trabajadores del fabricante Kia, filial de Hyundai, podrían unirse el viernes a la huelga, según indicó el dirigente del sindicato de trabajadores del Metal en Corea del Sur, Yu Chang-Hyun, quien anunció que “a menos que el Ejecutivo desestime su propuesta de vender Daewoo a una firma extranjera, la huelga se prolongará más allá de los 13 días que han previsto las organizaciones de trabajadores de Daewoo”.
Los huelguistas de Daewoo reclaman la nacionalización de la compañía surcoreana, ya que Hyundai tiene “mínimas posibilidades” (según el Gobierno de este país asiático) de equiparar su oferta a las de Ford, DaimlerChrysler, General Motors y Fiat.
