2006 se presenta bueno para las farmacéuticas

Las grandes firman farmacéuticas comenzaron 2006 anunciando próximos lanzamientos de nuevos tratamientos. Luego de un largo período de dificultades para encontrar remedios nuevos, los laboratorios están optimistas.

Incluso Merck, una de las grandes compañías más vapuleadas,
dice ahora que espera crecer 10% por año hasta 2010 y pide aprobación
del gobierno federal para media docena de fármacos y vacunas. El producto
más prometedor de todos los que tiene Merck en proceso de salida es Gardasil,
una vacuna para el cáncer cervical que, dicen los analistas, podría
llegar a generar miles de millones de dólares.

Los pesimistas advierten que en otras oportunidades las promesas de lanzamientos
hachas a principios de año han resultado falsas y dicen que el actual optimismo
proviene principalmente del éxito de corto plazo generados por los reducción
de costos, cuyos beneficios duran apenas unos meses. De todas maneras, ni siquiera
los más optimistas suponen que la escasez de nuevos tratamientos va a terminar
antes del fin de la década.

Con todo, después de un año plagado de despidos, reducción
de ganancias y advertencias gubernamentales sobre drogas potencialmente peligrosas,
el cambio de actitud es notable. Sidney Taurel, director ejecutivo de Eli Lilly,
enumeró varias aprobaciones recientes por parte de la Food and Drug
Administratio
n: nuevas drogas para el cáncer, de Pfizer y Bayer; un
tratamiento para la artritis reumatoidea de Bristol-Myers; y Exubera, una insulina
inhalable de Pfizer aprobada en la última semana de enero y que significa
toda una revolución en el control de la diabetes. “Hubo una cantidad
de aprobaciones de productos que muestran al mundo que el negocio no ha perdido
su capacidad para innovar,” dijo Taurel. “Hay un resurgir de la productividad
en investigación y desarrollo.”

Los triunfos recientes más concretos del negocio han provenido últimamente
del frente legal. En diciembre Pfizer, el laboratorio más grande del mundo,
ganó una pelea de patentes sobre Lipitor, un tratamiento para bajar el
colesterol que es su fármaco de mayor venta. Después de perder su
primer juicio por deudas relacionadas con el desastre de Vioxx, Merck ganó
el segundo y otro más fue rechazado por el juez. Los inversores parecen
satisfechos con la negativa de Merck a firmar acuerdos para no ir a juicio e insistir
en cambio que los casos se ventilen en la corte. Además, también
parece estar cediendo la crisis de imagen que sufrió todo el sector después
de que la compañía retirara Vioxx del mercado.

Un tema que sigue complicado es el de los precios de los medicamentos, pero también
está pasando a formar un aspecto más del costo general del costo
de los planes de salud en el país. Por su parte la FDA (Food and Drug
Administration)
sufre presiones para que acelere la aprobación de drogas
potencialmente salvadoras, y ha dado señales de que acortará las
pruebas clínicas de medicinas para enfermedades graves como el cáncer.

Finalmente, parece hacer señales de que en 2006 aumentarán las órdenes
para medicamentos recetados. Una investigacion realizada por Merril Lynch descubrió
que las recetas nuevas habían subido a razón de 6,6% en la primera
semana de enero con respecto al mismo período del año anterior.

La reciente aprobación de drogas contra el cáncer, como Sutent,
de Pfizer, y Nexavar, de Bayer, eleva las esperanzas de que los científicos
descubran nuevas formas de luchar contra la enfermedad a nivel celular, dijo un
analista de SunTrust Robertson Humphrey.

Incluso Merck, una de las grandes compañías más vapuleadas,
dice ahora que espera crecer 10% por año hasta 2010 y pide aprobación
del gobierno federal para media docena de fármacos y vacunas. El producto
más prometedor de todos los que tiene Merck en proceso de salida es Gardasil,
una vacuna para el cáncer cervical que, dicen los analistas, podría
llegar a generar miles de millones de dólares.

Los pesimistas advierten que en otras oportunidades las promesas de lanzamientos
hachas a principios de año han resultado falsas y dicen que el actual optimismo
proviene principalmente del éxito de corto plazo generados por los reducción
de costos, cuyos beneficios duran apenas unos meses. De todas maneras, ni siquiera
los más optimistas suponen que la escasez de nuevos tratamientos va a terminar
antes del fin de la década.

Con todo, después de un año plagado de despidos, reducción
de ganancias y advertencias gubernamentales sobre drogas potencialmente peligrosas,
el cambio de actitud es notable. Sidney Taurel, director ejecutivo de Eli Lilly,
enumeró varias aprobaciones recientes por parte de la Food and Drug
Administratio
n: nuevas drogas para el cáncer, de Pfizer y Bayer; un
tratamiento para la artritis reumatoidea de Bristol-Myers; y Exubera, una insulina
inhalable de Pfizer aprobada en la última semana de enero y que significa
toda una revolución en el control de la diabetes. “Hubo una cantidad
de aprobaciones de productos que muestran al mundo que el negocio no ha perdido
su capacidad para innovar,” dijo Taurel. “Hay un resurgir de la productividad
en investigación y desarrollo.”

Los triunfos recientes más concretos del negocio han provenido últimamente
del frente legal. En diciembre Pfizer, el laboratorio más grande del mundo,
ganó una pelea de patentes sobre Lipitor, un tratamiento para bajar el
colesterol que es su fármaco de mayor venta. Después de perder su
primer juicio por deudas relacionadas con el desastre de Vioxx, Merck ganó
el segundo y otro más fue rechazado por el juez. Los inversores parecen
satisfechos con la negativa de Merck a firmar acuerdos para no ir a juicio e insistir
en cambio que los casos se ventilen en la corte. Además, también
parece estar cediendo la crisis de imagen que sufrió todo el sector después
de que la compañía retirara Vioxx del mercado.

Un tema que sigue complicado es el de los precios de los medicamentos, pero también
está pasando a formar un aspecto más del costo general del costo
de los planes de salud en el país. Por su parte la FDA (Food and Drug
Administration)
sufre presiones para que acelere la aprobación de drogas
potencialmente salvadoras, y ha dado señales de que acortará las
pruebas clínicas de medicinas para enfermedades graves como el cáncer.

Finalmente, parece hacer señales de que en 2006 aumentarán las órdenes
para medicamentos recetados. Una investigacion realizada por Merril Lynch descubrió
que las recetas nuevas habían subido a razón de 6,6% en la primera
semana de enero con respecto al mismo período del año anterior.

La reciente aprobación de drogas contra el cáncer, como Sutent,
de Pfizer, y Nexavar, de Bayer, eleva las esperanzas de que los científicos
descubran nuevas formas de luchar contra la enfermedad a nivel celular, dijo un
analista de SunTrust Robertson Humphrey.

Compartir:

spot_img
spot_img

Noticias

CONTENIDO RELACIONADO