El efecto de las mareas en la Playa Bristol, en Mar del Plata, el mar se desquitó de la intervención del hombre, hace pocos meses, cuando se produjeron obras para extender la costa, y se llevó una gran porción de arena. En su lugar, quedó un terraplén de unos 70 centímetros de altura que se extiende a lo largo de toda la ribera. Al igual que en Playa Grande y Playa de los Ingleses, en la Bristol se duplicaron, al final del año pasado, las respectivas superficies. El costo total del rellenado de arena había sido de 30 millones de pesos. Sin embargo, Alberto Lagrange, un experto en hidráulica e integrante de la Comisión de Defensa del Puerto y las Playas Marplatenses, sostuvo que “era previsible que el mar reaccionara de alguna manera”. Pero el ingeniero le restó importancia al fenómeno: “No hay que alarmarse todavía, pues el daño no es relevante. Puede que lo que se ha llevado el agua sea el exceso de arena que se volcó”.
El efecto de las mareas en la Playa Bristol, en Mar del Plata, el mar se desquitó de la intervención del hombre, hace pocos meses, cuando se produjeron obras para extender la costa, y se llevó una gran porción de arena. En su lugar, quedó un terraplén de unos 70 centímetros de altura que se extiende a lo largo de toda la ribera. Al igual que en Playa Grande y Playa de los Ingleses, en la Bristol se duplicaron, al final del año pasado, las respectivas superficies. El costo total del rellenado de arena había sido de 30 millones de pesos. Sin embargo, Alberto Lagrange, un experto en hidráulica e integrante de la Comisión de Defensa del Puerto y las Playas Marplatenses, sostuvo que “era previsible que el mar reaccionara de alguna manera”. Pero el ingeniero le restó importancia al fenómeno: “No hay que alarmarse todavía, pues el daño no es relevante. Puede que lo que se ha llevado el agua sea el exceso de arena que se volcó”.
