El déficit fiscal de octubre último fue de $ 507,1 millones, logrando una reducción en $ 245,1 millones con respecto al mismo mes del año próximo pasado.
La mejora se debió a un incremento en los ingresos con privatizaciones; según la Secretaría de Hacienda, en el último mes los ingresos sumaron $ 1585,8 millones, $ 345,2 millones más que el año pasado.
De este total, $ 45,7 millones, corresponden al ingreso de privatizaciones; “Los recursos de capital, en concepto de privatizaciones, se originan en la venta de la cartera accionaria del Estado nacional en Camuzzi Gas Pampeana”, aclaró Economía.
En octubre de 2000 también los gastos totales aumentaron $ 113,1 millones de pesos, que sumaron en octubre último unos $ 2001, 3 millones, contra los $ 1888,2 millones de octubre de 1999.
Los gastos corrientes mostraron una suba de 89,5 millones, totalizando 1937,6 millones de pesos.
Lo mismo ocurrió con los gastos de capital (inversión real directa, transferencias a las provincias, inversión financieras y gastos figurativos), con una suba de 63,7 millones.
Respecto del componente de las erogaciones primarias, “las remuneraciones pagadas descienden $ 37,8 millones, así como el gasto en bienes y servicios, que bajó $ 28,9 millones.
Por su parte, los conceptos correspondientes a transferencias a universidades y gastos figurativos a instituciones de seguridad social aumentaron $ 20,3 millones y $ 24,4 millones respectivamente”.
Con este resultado, el Gobierno deberá ceñir el desbalance de las cuentas públicas en $ 977,1 millones durante el bimestre noviembre-diciembre para cumplir con la meta anual de $ 5300 millones acordada con el Fondo Monetario Internacional.
Para el último trimestre del año, la Argentina se había comprometido a mantener su rojo fiscal por debajo de US$ 1450 millones, tope que se amplió a US$ 1484,2 millones, luego de obtener en septiembre un sobre cumplimiento de US$ 34,2 millones.
En una conferencia de prensa, el ministro de Economía, José Luis Machinea, afirmó que “la Argentina cumplirá con las pautas acordadas”.
El déficit fiscal de octubre último fue de $ 507,1 millones, logrando una reducción en $ 245,1 millones con respecto al mismo mes del año próximo pasado.
La mejora se debió a un incremento en los ingresos con privatizaciones; según la Secretaría de Hacienda, en el último mes los ingresos sumaron $ 1585,8 millones, $ 345,2 millones más que el año pasado.
De este total, $ 45,7 millones, corresponden al ingreso de privatizaciones; “Los recursos de capital, en concepto de privatizaciones, se originan en la venta de la cartera accionaria del Estado nacional en Camuzzi Gas Pampeana”, aclaró Economía.
En octubre de 2000 también los gastos totales aumentaron $ 113,1 millones de pesos, que sumaron en octubre último unos $ 2001, 3 millones, contra los $ 1888,2 millones de octubre de 1999.
Los gastos corrientes mostraron una suba de 89,5 millones, totalizando 1937,6 millones de pesos.
Lo mismo ocurrió con los gastos de capital (inversión real directa, transferencias a las provincias, inversión financieras y gastos figurativos), con una suba de 63,7 millones.
Respecto del componente de las erogaciones primarias, “las remuneraciones pagadas descienden $ 37,8 millones, así como el gasto en bienes y servicios, que bajó $ 28,9 millones.
Por su parte, los conceptos correspondientes a transferencias a universidades y gastos figurativos a instituciones de seguridad social aumentaron $ 20,3 millones y $ 24,4 millones respectivamente”.
Con este resultado, el Gobierno deberá ceñir el desbalance de las cuentas públicas en $ 977,1 millones durante el bimestre noviembre-diciembre para cumplir con la meta anual de $ 5300 millones acordada con el Fondo Monetario Internacional.
Para el último trimestre del año, la Argentina se había comprometido a mantener su rojo fiscal por debajo de US$ 1450 millones, tope que se amplió a US$ 1484,2 millones, luego de obtener en septiembre un sobre cumplimiento de US$ 34,2 millones.
En una conferencia de prensa, el ministro de Economía, José Luis Machinea, afirmó que “la Argentina cumplirá con las pautas acordadas”.
