La reforma previsional anunciada el viernes por el presidente Fernando de la Rúa saldrá entre hoy (lunes 13) y mañana por decreto de necesidad y urgencia.
La oposición había adelantado que no había disposición para votar en el Congreso las modificaciones al régimen, y el Presidente precisa mostrar a los mercados firmeza en sus decisiones y capacidad de ejecución para concretar las mismas.
Los cambios a los que se opone el PJ, consisten en la eliminación del régimen de jubilación estatal para los nuevos trabajadores, la eliminación de la Prestación Básica Universal (PBU) para los futuros jubilados, el aumento gradual de la edad jubilatoria de las mujeres de 60 a 65 años y el establecimiento de un tope de $ 120 por mes a las pensiones graciables.
También habrá cambios en la jubilación privada, y los nuevos militares tendrán un régimen jubilatorio similar al de las AFJP.
El fin del régimen jubilatorio estatal no afecta a los actuales jubilados, que siguen cobrando sus haberes de la Anses, ni a los trabajadores que están en actividad afiliados al sistema público que siguen aportando al Estado, salvo que voluntariamente se pasen a una AFJP.
La única medida que comprende a los actuales jubilados es que ,desde el próximo enero, ningún jubilado mayor de 80 años cobrará menos de $ 200 pesos; sin embargo, esta medida ya está en vigencia porque para los que ganan el haber mínimo y tienen más de 67 años rige un “subsidio a la pobreza” que lleva la jubilación total entre $ 200 y $ 220 pesos mensuales.
Cómo se cristalizarán las medidas anunciadas y qué efectos tendrán sobre la vida de los jubilados:
· La eliminación de la Prestación Básica Universal significa que los trabajadores, tanto los afiliados a la Anses como a una AFJP, que se jubilen a partir de la fecha que determine el decreto ,no tendrán derecho a cobrar ese beneficio que actualmente es de $ 200 a $ 230 pesos por mes, según los años aportados por el trabajador; de esta manera se produce una importante recorte en los haberes jubilatorios de gran parte de la población.
· Se establece un tope de $ 120 mensuales para la pensiones graciables. Esas pensiones podrán ser renovables cada 5 años.
· La abolición del sistema previsional público significa que, a partir del 2001, toda persona que empiece a trabajar en forma independiente o en relación de dependencia tendrá que afiliarse a una AFJP. Con esto desaparece la actual opción del nuevo empleado de elegir el sistema estatal o privado.
· Las AFJP sólo podrán cobrar una comisión uniforme, como porcentaje del sueldo, a todos sus afiliados. Se elimina la parte fija de la comisión.
· Los indecisos —los que no eligen su AFJP— irán a la que cobren la comisión más baja. Y habrá un límite al número de afiliados que puede tener cada AFJP.
La reforma previsional anunciada el viernes por el presidente Fernando de la Rúa saldrá entre hoy (lunes 13) y mañana por decreto de necesidad y urgencia.
La oposición había adelantado que no había disposición para votar en el Congreso las modificaciones al régimen, y el Presidente precisa mostrar a los mercados firmeza en sus decisiones y capacidad de ejecución para concretar las mismas.
Los cambios a los que se opone el PJ, consisten en la eliminación del régimen de jubilación estatal para los nuevos trabajadores, la eliminación de la Prestación Básica Universal (PBU) para los futuros jubilados, el aumento gradual de la edad jubilatoria de las mujeres de 60 a 65 años y el establecimiento de un tope de $ 120 por mes a las pensiones graciables.
También habrá cambios en la jubilación privada, y los nuevos militares tendrán un régimen jubilatorio similar al de las AFJP.
El fin del régimen jubilatorio estatal no afecta a los actuales jubilados, que siguen cobrando sus haberes de la Anses, ni a los trabajadores que están en actividad afiliados al sistema público que siguen aportando al Estado, salvo que voluntariamente se pasen a una AFJP.
La única medida que comprende a los actuales jubilados es que ,desde el próximo enero, ningún jubilado mayor de 80 años cobrará menos de $ 200 pesos; sin embargo, esta medida ya está en vigencia porque para los que ganan el haber mínimo y tienen más de 67 años rige un “subsidio a la pobreza” que lleva la jubilación total entre $ 200 y $ 220 pesos mensuales.
Cómo se cristalizarán las medidas anunciadas y qué efectos tendrán sobre la vida de los jubilados:
· La eliminación de la Prestación Básica Universal significa que los trabajadores, tanto los afiliados a la Anses como a una AFJP, que se jubilen a partir de la fecha que determine el decreto ,no tendrán derecho a cobrar ese beneficio que actualmente es de $ 200 a $ 230 pesos por mes, según los años aportados por el trabajador; de esta manera se produce una importante recorte en los haberes jubilatorios de gran parte de la población.
· Se establece un tope de $ 120 mensuales para la pensiones graciables. Esas pensiones podrán ser renovables cada 5 años.
· La abolición del sistema previsional público significa que, a partir del 2001, toda persona que empiece a trabajar en forma independiente o en relación de dependencia tendrá que afiliarse a una AFJP. Con esto desaparece la actual opción del nuevo empleado de elegir el sistema estatal o privado.
· Las AFJP sólo podrán cobrar una comisión uniforme, como porcentaje del sueldo, a todos sus afiliados. Se elimina la parte fija de la comisión.
· Los indecisos —los que no eligen su AFJP— irán a la que cobren la comisión más baja. Y habrá un límite al número de afiliados que puede tener cada AFJP.
