(EFE).- Un juez federal dio hoy (lunes 13) un fuerte revés al Partido Republicano al rechazar una petición para que emitiera un interdicto para prohibir el recuento manual de votos en tres condados de Florida.
El juez Donald Middlebrooks dijo, tras escuchar los argumentos de ambas partes, que la decisión de suspender el recuento manual no corresponde a un tribunal federal y que debe considerarse a nivel estatal
Esta decisión viene a dar luz verde a los recuentos manuales que tienen lugar en los condados de Volusia, Palm Beach y Broward, en el sureste de Florida, donde surgieron nuevos votos para el candidato presidencial demócrata, Al Gore.
En disputa están los 25 votos electorales de Florida que darían a Bush o Gore los necesarios 270 para poder llegar a la Casa Blanca.
Gore cuenta actualmente con 255 votos electorales y Bush 245, mientras que están por decidirse los 37 de Florida, Nuevo México y Oregon. El candidato demócrata también aventaja a Bush en el voto popular a nivel nacional por 216.000 votos.
Esta fue la primera vez que la lucha electoral entre Bush y Gore es llevada a los tribunales, casi una semana después de la celebración de las elecciones presidenciales, el martes pasado, que no dio todavía un claro ganador.
El Partido Republicano alega que un recuento manual en estos condados sería injusto para otros donde no se ordenó algo similar y que esa forma de contar podría dar a lugar a “errores humanos” o “manipulaciones”.
El abogado Theodore Olsen incluso llegó a decir en la vista de hoy que un recuento manual en esos condados podría ser una violación de los derechos constitucionales de los residentes de otros condados donde no se celebró un procedimiento similar.
Olsen dijo que no había razón para hacer un recuento en esos condados ya que no se apreció fraude alguno y que si hubo errores en la tabulación mecánica de los votos, “eso siempre pasa en todas las elecciones”.
Un recuento manual realizado el sábado en el condado de Palm Beach de sólo 1% del total de votos de más de 400.000 detectó más de 20 votos nuevos para Gore, que habían sido ignorados por dos recuentos automatizados.
Si eso se extrapola a un recuento manual total, los casi 2.000 votos nuevos que podrían surgir para Gore le podría ayudar al candidato demócrata para alcanzar la victoria en Florida y, en consecuencia, la presidencia de Estados Unidos.
Abogados de Partido Demócrata y de las juntas electorales de esos condados pidieron al juez que rechazara la petición y se preguntaron por qué tienen tanto miedo los republicanos a que se sepa lo que realmente votaron los residentes de esas localidades.
La vista tuvo lugar en el edificio de los tribunales federales, en el centro de Miami, bajo fuertes medidas de seguridad y una numerosa presencia de medios de comunicación, especialmente de televisión.
Antes de comenzar la sesión, el juez negó una petición de las grandes cadenas de televisión ABC, CBS, NBC y CNN para que se permitiera el ingreso de un cámara de televisión para transmitir en directo a todo el país “un acto de tanta trascendencia”.
Un recuento total en el condado de Palm Beach, un reducto demócrata por la gran cantidad de jubilados judíos, podría durar cuatro o cinco días. El de Volusia comenzó ayer, domingo, y en Broward se iba a realizar hoy uno parcial, de sólo 1%.
El condado de Miami-Dade tiene previsto estudiar mañana si realiza también un recuento manual, parcial o total.
Todos estos recuentos manuales podrían quedar en el aire si se mantiene una decisión de la secretaria de Estado de Florida, Katherine Harris, de que el plazo para que los condados presenten los resultados finales termina mañana a las 22 GMT.
El Partido Demócrata acudió inmediatamente a los tribunales estatales para pedir a las autoridades de Florida que amplíen ese plazo para dar tiempo a los condados a entregar sus resultados finales.
(EFE).- Un juez federal dio hoy (lunes 13) un fuerte revés al Partido Republicano al rechazar una petición para que emitiera un interdicto para prohibir el recuento manual de votos en tres condados de Florida.
El juez Donald Middlebrooks dijo, tras escuchar los argumentos de ambas partes, que la decisión de suspender el recuento manual no corresponde a un tribunal federal y que debe considerarse a nivel estatal
Esta decisión viene a dar luz verde a los recuentos manuales que tienen lugar en los condados de Volusia, Palm Beach y Broward, en el sureste de Florida, donde surgieron nuevos votos para el candidato presidencial demócrata, Al Gore.
En disputa están los 25 votos electorales de Florida que darían a Bush o Gore los necesarios 270 para poder llegar a la Casa Blanca.
Gore cuenta actualmente con 255 votos electorales y Bush 245, mientras que están por decidirse los 37 de Florida, Nuevo México y Oregon. El candidato demócrata también aventaja a Bush en el voto popular a nivel nacional por 216.000 votos.
Esta fue la primera vez que la lucha electoral entre Bush y Gore es llevada a los tribunales, casi una semana después de la celebración de las elecciones presidenciales, el martes pasado, que no dio todavía un claro ganador.
El Partido Republicano alega que un recuento manual en estos condados sería injusto para otros donde no se ordenó algo similar y que esa forma de contar podría dar a lugar a “errores humanos” o “manipulaciones”.
El abogado Theodore Olsen incluso llegó a decir en la vista de hoy que un recuento manual en esos condados podría ser una violación de los derechos constitucionales de los residentes de otros condados donde no se celebró un procedimiento similar.
Olsen dijo que no había razón para hacer un recuento en esos condados ya que no se apreció fraude alguno y que si hubo errores en la tabulación mecánica de los votos, “eso siempre pasa en todas las elecciones”.
Un recuento manual realizado el sábado en el condado de Palm Beach de sólo 1% del total de votos de más de 400.000 detectó más de 20 votos nuevos para Gore, que habían sido ignorados por dos recuentos automatizados.
Si eso se extrapola a un recuento manual total, los casi 2.000 votos nuevos que podrían surgir para Gore le podría ayudar al candidato demócrata para alcanzar la victoria en Florida y, en consecuencia, la presidencia de Estados Unidos.
Abogados de Partido Demócrata y de las juntas electorales de esos condados pidieron al juez que rechazara la petición y se preguntaron por qué tienen tanto miedo los republicanos a que se sepa lo que realmente votaron los residentes de esas localidades.
La vista tuvo lugar en el edificio de los tribunales federales, en el centro de Miami, bajo fuertes medidas de seguridad y una numerosa presencia de medios de comunicación, especialmente de televisión.
Antes de comenzar la sesión, el juez negó una petición de las grandes cadenas de televisión ABC, CBS, NBC y CNN para que se permitiera el ingreso de un cámara de televisión para transmitir en directo a todo el país “un acto de tanta trascendencia”.
Un recuento total en el condado de Palm Beach, un reducto demócrata por la gran cantidad de jubilados judíos, podría durar cuatro o cinco días. El de Volusia comenzó ayer, domingo, y en Broward se iba a realizar hoy uno parcial, de sólo 1%.
El condado de Miami-Dade tiene previsto estudiar mañana si realiza también un recuento manual, parcial o total.
Todos estos recuentos manuales podrían quedar en el aire si se mantiene una decisión de la secretaria de Estado de Florida, Katherine Harris, de que el plazo para que los condados presenten los resultados finales termina mañana a las 22 GMT.
El Partido Demócrata acudió inmediatamente a los tribunales estatales para pedir a las autoridades de Florida que amplíen ese plazo para dar tiempo a los condados a entregar sus resultados finales.