José Luis Machinea justificó el aumento de tarifas en el transporte público, al sostener que los colectivos debieron afrontar duras y repetidas subas del precio del gasoil.
El Ministro de Economía aclaró que el caso de los trenes y subtes fue distinto: los contratos firmados por las empresas que poseen la concesión de esos servicios con el gobierno anterior les permitían realizar estos ajustes.
“Desgraciadamente –dijo el funcionario nacional- nunca es momento para aumentar las tarifas y por eso peleamos para mantener el aumento lo menor posible”, remarcó.
Luego de la reunión de gabinete, el titular del Palacio de Hacienda comentó que durante el encuentro se dieron detalles acerca del “por qué del aumento” y de sus “características”, y señaló que uno de los motivos de la suba del boleto de colectivo fue el aumento del precio del gasoil.
El Gobierno Nacional dispuso que a partir de hoy (sábado 02) a la medianoche, los boletos de los colectivos, el cospel de subtes y las tres primeras secciones de los trenes de pasajeros, aumenten 10 centavos.
En subtes, el aumento será de 16,6%, mientras que en los colectivos va de 14,3% a 15,4%.
La tarifa del subte costará 70 centavos, mientras que el boleto mínimo del colectivo será de 75 centavos y la segunda sección, la más extendida en la Capital Federal, costará 80 centavos.
En cuanto a las tarifas del ferrocarril, el aumento es de 28,6%, para las dos secciones más baratas de la línea Roca y San Martín, mientras que en la primera sección de la línea Mitre el impacto es de 25%.
El ministro de Economía dijo también que los subsidios a trenes y subtes fueron quitados del presupuesto del año próximo, pero aclaró que el aumento era necesario para poder llevar adelante el plan de obras previstas para 2001.
El Estado debía aportar $ 286 millones para la ejecución de las mismas, pero el Congreso recortó esa suma a $ 78 millones.
Según los cálculos, los colectivos recaudarán unos $ 138 millones adicionales al año por la suba, mientras que el subte facturará $ 26 millones anuales más.
Para los trenes, el aumento representa un incremento de la recaudación de unos $ 50 millones.
El Gobierno negoció con las empresas de trenes que ese monto sea depositado en un fondo fiduciario; por cada centavo de los 10 que constituyen el aumento, 9 serán para pagar las futuras obras de infraestructura, y el restante para achicar la deuda que mantiene con la empresas concesionarias.
El resto de la deuda será pagada con bonos que emitirá el Gobierno.
José Luis Machinea justificó el aumento de tarifas en el transporte público, al sostener que los colectivos debieron afrontar duras y repetidas subas del precio del gasoil.
El Ministro de Economía aclaró que el caso de los trenes y subtes fue distinto: los contratos firmados por las empresas que poseen la concesión de esos servicios con el gobierno anterior les permitían realizar estos ajustes.
“Desgraciadamente –dijo el funcionario nacional- nunca es momento para aumentar las tarifas y por eso peleamos para mantener el aumento lo menor posible”, remarcó.
Luego de la reunión de gabinete, el titular del Palacio de Hacienda comentó que durante el encuentro se dieron detalles acerca del “por qué del aumento” y de sus “características”, y señaló que uno de los motivos de la suba del boleto de colectivo fue el aumento del precio del gasoil.
El Gobierno Nacional dispuso que a partir de hoy (sábado 02) a la medianoche, los boletos de los colectivos, el cospel de subtes y las tres primeras secciones de los trenes de pasajeros, aumenten 10 centavos.
En subtes, el aumento será de 16,6%, mientras que en los colectivos va de 14,3% a 15,4%.
La tarifa del subte costará 70 centavos, mientras que el boleto mínimo del colectivo será de 75 centavos y la segunda sección, la más extendida en la Capital Federal, costará 80 centavos.
En cuanto a las tarifas del ferrocarril, el aumento es de 28,6%, para las dos secciones más baratas de la línea Roca y San Martín, mientras que en la primera sección de la línea Mitre el impacto es de 25%.
El ministro de Economía dijo también que los subsidios a trenes y subtes fueron quitados del presupuesto del año próximo, pero aclaró que el aumento era necesario para poder llevar adelante el plan de obras previstas para 2001.
El Estado debía aportar $ 286 millones para la ejecución de las mismas, pero el Congreso recortó esa suma a $ 78 millones.
Según los cálculos, los colectivos recaudarán unos $ 138 millones adicionales al año por la suba, mientras que el subte facturará $ 26 millones anuales más.
Para los trenes, el aumento representa un incremento de la recaudación de unos $ 50 millones.
El Gobierno negoció con las empresas de trenes que ese monto sea depositado en un fondo fiduciario; por cada centavo de los 10 que constituyen el aumento, 9 serán para pagar las futuras obras de infraestructura, y el restante para achicar la deuda que mantiene con la empresas concesionarias.
El resto de la deuda será pagada con bonos que emitirá el Gobierno.