Las diferencias se encuentran, además, en el plazo de
levantamiento de restricciones en cajas de ahorro y cuentas
corrientes, y la eliminación del CER.
Así lo indicaron el gerente general del Banco Credicoop, Carlos
Heller, y el presidente del Banco Ciudad, Roberto Feletti.
Heller dijo que “hay una cuestión muy difícil de implementar,
que es que los bonos tengan garantía de los bancos. Nadie encontró
la vuelta para instrumentar un bono del Estado que va a tener
libre circulación con garantía particular de las entidades
financieras”.
Según Heller, con el Gobierno “hay diferencias de criterio que
son normales en este tipo de cuestiones. Todos estamos de acuerdo
en levantar las restricciones que hoy pesan sobre las cuentas a la
vista. Pero la pregunta que planteamos es de dónde saldrá la
liquidez para afrontar ese levantamiento, o cuál será el costo
para hacerlo”.
“Inclusive, nosotros pensamos que tal vez sería mejor que
existiera un bono de tres años para este tipo de colocaciones, que
pudiera ser muy atractivo”, subrayó el directivo.
Heller justificó la decisión de canjear plazos fijos
reprogramados por bonos del Estado, al señalar que “esta es la
solución que se busca para un sistema financiero que ha perdido su
capacidad de devolución de los depósitos, porque sufrió una
corrida que se llevó su liquidez”.
Con respecto a la eliminación del CER, el banquero reconoció el
malestar que existe en el sector financiero por la decisión que
tomó el Gobierno, que -según alertó- “puede llevar al quebranto”
a las entidades financieras.
“Los bancos toman redescuentos que les da el Banco Central para
comprar los bonos, y esos redescuentos están indexados con el CER.
Es decir, nos quedamos con todo el CER en contra y se nos elimina
el CER a favor”, dijo el banquero en declaraciones radiales.
“Esto puede generar un quebranto de las entidades financieras.
Acá no se trata de que los bancos se queden con un beneficio, sino
que se está midiendo si están en condiciones de soportar el
quebranto que les va a significar quedarse con una obligación con
CER, como son los redescuentos, contra activos que dejan de estar
ajustados”, dijo Heller.
Afirmó, que la propuesta de los bancos “es que en la misma
proporción que se liberan carteras activas de deudores del sistema
financiero, el Banco Central otorgue a cada entidad redescuentos
que no vayan ajustados por CER”.
“De esa manera, el impacto sería neutro para las entidades
financieras, pero desde luego tendría costo fiscal. Y acá el
Gobierno no quiere que eso suceda”, agregó.
Por su parte, Feletti admitió que entre el gobierno y los
bancos extranjeros “existe mucha tensión” por cómo resolver el
“corralito”, y estimó “razonable” que las restricciones que pesan
sobre las cuentas a la vista desaparezcan totalmente en cuatro
meses, tal como pretende el Ministerio de Economía.
“Las tensiones son muchas. Por un lado, está la postura del
gobierno y el Congreso, y por el otro, la de los bancos
extranjeros. Y eso posterga las definiciones”, señaló.
En diálogo con la agencia Noticias Argentinas, Feletti
puntualizó que el motivo de las diferencias entre Economía y los
bancos pasa por la flexibilización del “corralito” para las
cuentas a la vista y la instrumentación del nuevo “Plan Bonex”.
“El planteo que hace el gobierno tiende a aproximar a los
bancos para que éstos se comprometan en la solución del corralito.
Por eso pide garantías de las entidades financieras para entregar
los bonos a los ahorristas, ya que no quiere aumentar el stock
de deuda pública”, indicó el funcionario.
A su criterio, es “razonable” que se levanten las restricciones
que tienen las cajas de ahorro y cuentas corrientes tal como lo
propone el gobierno: ampliar el límite mensual a 2 mil pesos a
partir de este mes, para que en setiembre el “corralito”
pase al recuerdo.
Pero aclaró que ésto sería posible sólo si el país “logra
superávit en su balanza comercial, el gobierno construye un nivel
de reservas razonables en el Banco Central y a la vez aplica una
política monetaria consistente”.
Feletti señaló, además, que la liberación del “corralito”
encierra un interrogante: “Saber cuánto de ese dinero que se
libera va a presionar sobre el tipo de cambio, y cuánto se volcará
a movilizar la parálisis que sufre la actividad económica”.
“Es razonable que el gobierno vuelque liquidez al mercado
abriendo el corralito”, consideró Feletti.
Fuente: Noticias Argentinas
Las diferencias se encuentran, además, en el plazo de
levantamiento de restricciones en cajas de ahorro y cuentas
corrientes, y la eliminación del CER.
Así lo indicaron el gerente general del Banco Credicoop, Carlos
Heller, y el presidente del Banco Ciudad, Roberto Feletti.
Heller dijo que “hay una cuestión muy difícil de implementar,
que es que los bonos tengan garantía de los bancos. Nadie encontró
la vuelta para instrumentar un bono del Estado que va a tener
libre circulación con garantía particular de las entidades
financieras”.
Según Heller, con el Gobierno “hay diferencias de criterio que
son normales en este tipo de cuestiones. Todos estamos de acuerdo
en levantar las restricciones que hoy pesan sobre las cuentas a la
vista. Pero la pregunta que planteamos es de dónde saldrá la
liquidez para afrontar ese levantamiento, o cuál será el costo
para hacerlo”.
“Inclusive, nosotros pensamos que tal vez sería mejor que
existiera un bono de tres años para este tipo de colocaciones, que
pudiera ser muy atractivo”, subrayó el directivo.
Heller justificó la decisión de canjear plazos fijos
reprogramados por bonos del Estado, al señalar que “esta es la
solución que se busca para un sistema financiero que ha perdido su
capacidad de devolución de los depósitos, porque sufrió una
corrida que se llevó su liquidez”.
Con respecto a la eliminación del CER, el banquero reconoció el
malestar que existe en el sector financiero por la decisión que
tomó el Gobierno, que -según alertó- “puede llevar al quebranto”
a las entidades financieras.
“Los bancos toman redescuentos que les da el Banco Central para
comprar los bonos, y esos redescuentos están indexados con el CER.
Es decir, nos quedamos con todo el CER en contra y se nos elimina
el CER a favor”, dijo el banquero en declaraciones radiales.
“Esto puede generar un quebranto de las entidades financieras.
Acá no se trata de que los bancos se queden con un beneficio, sino
que se está midiendo si están en condiciones de soportar el
quebranto que les va a significar quedarse con una obligación con
CER, como son los redescuentos, contra activos que dejan de estar
ajustados”, dijo Heller.
Afirmó, que la propuesta de los bancos “es que en la misma
proporción que se liberan carteras activas de deudores del sistema
financiero, el Banco Central otorgue a cada entidad redescuentos
que no vayan ajustados por CER”.
“De esa manera, el impacto sería neutro para las entidades
financieras, pero desde luego tendría costo fiscal. Y acá el
Gobierno no quiere que eso suceda”, agregó.
Por su parte, Feletti admitió que entre el gobierno y los
bancos extranjeros “existe mucha tensión” por cómo resolver el
“corralito”, y estimó “razonable” que las restricciones que pesan
sobre las cuentas a la vista desaparezcan totalmente en cuatro
meses, tal como pretende el Ministerio de Economía.
“Las tensiones son muchas. Por un lado, está la postura del
gobierno y el Congreso, y por el otro, la de los bancos
extranjeros. Y eso posterga las definiciones”, señaló.
En diálogo con la agencia Noticias Argentinas, Feletti
puntualizó que el motivo de las diferencias entre Economía y los
bancos pasa por la flexibilización del “corralito” para las
cuentas a la vista y la instrumentación del nuevo “Plan Bonex”.
“El planteo que hace el gobierno tiende a aproximar a los
bancos para que éstos se comprometan en la solución del corralito.
Por eso pide garantías de las entidades financieras para entregar
los bonos a los ahorristas, ya que no quiere aumentar el stock
de deuda pública”, indicó el funcionario.
A su criterio, es “razonable” que se levanten las restricciones
que tienen las cajas de ahorro y cuentas corrientes tal como lo
propone el gobierno: ampliar el límite mensual a 2 mil pesos a
partir de este mes, para que en setiembre el “corralito”
pase al recuerdo.
Pero aclaró que ésto sería posible sólo si el país “logra
superávit en su balanza comercial, el gobierno construye un nivel
de reservas razonables en el Banco Central y a la vez aplica una
política monetaria consistente”.
Feletti señaló, además, que la liberación del “corralito”
encierra un interrogante: “Saber cuánto de ese dinero que se
libera va a presionar sobre el tipo de cambio, y cuánto se volcará
a movilizar la parálisis que sufre la actividad económica”.
“Es razonable que el gobierno vuelque liquidez al mercado
abriendo el corralito”, consideró Feletti.
Fuente: Noticias Argentinas