(EFE).- Las bolsas de Nueva York cerraron hoy (viernes 16) con una fortísima tendencia a la baja, que completa la peor semana de negocios, medida en puntos, de la historia del promedio industrial Dow Jones.
Este promedio, el más importante de las bolsas de Nueva York, bajó 207,87 puntos (2,07%), hasta 9.823,41, la cifra más baja en los últimos 12 meses.
Con esta baja, sumada a las del lunes y el miércoles pasados, de 436 y 317 puntos, respectivamente, el Dow Jones completa una caída de 821 puntos (7,71%) en las cinco sesiones de la semana.
Esta caída semanal es la mayor de la historia del Dow Jones, medida en puntos, pues supera los 805 puntos (7,25%) que perdió en la segunda semana de abril de 2000, la anterior marca de pérdidas semanales.
Sin embargo, en términos porcentuales, la baja de la presente semana no figura dentro de las más importantes en la historia del mercado, y sólo ocupa el lugar 44 dentro de las más fuertes caídas.
Con todo, los inversores sintieron con rudeza el golpe de las caídas de lunes, miércoles y viernes, días en que las advertencias de empresas y las dudas sobre el futuro de la economía estadounidense afectaron mucho a los mercados.
Por otra parte el Nasdaq, mercado electrónico en que cambian de manos la mayor parte de las acciones de empresas de nuevas tecnologías, informática e Internet, bajó 49,80 puntos (2,56%), hasta 1.890,91 puntos, la cifra más baja desde noviembre de 1998.
En la semana el Nasdaq perdió 162 puntos (7,9%).
El S&P500, promedio que tiene en cuenta la evolución de 500 empresas bajó hoy 23,03 puntos (1,96%), hasta 1.150,53 puntos, mientras el New York Stock Exchange (NYSE), que incluye todos los títulos tradicionales de Wall Street, retrocedió 6,34 puntos para colocarse en 592,61.
El volumen de negocios fue bastante muy alto, de unos 1.548 millones de acciones, producto de que hoy fue día de triple cierre de operaciones con futuros y opciones de acciones.
Entre los títulos que cambiaron de manos 996 subieron, 2.049 bajaron y 221 se mantuvieron sin cambios.
Los bonos del Tesoro a 30 años subieron de precio y su tasa, que se mueve en sentido inverso al valor, bajó a 5,27% desde 5,28% del cierre de ayer jueves.
Las bolsas han sido afectadas en las últimas sesiones por una serie de advertencias de empresas del sector de las nuevas tecnologías, las previsiones económicas de Japón y Europa y las dudas sobre el futuro de la economía estadounidense y del futuro de las tasas de interés.
El fabricante de computadoras Compaq informó anoche que decidió despedir a 5.000 empleados, 7% de su plantel, como una forma de reducir sus gastos para poder afrontar la desaceleración económica en Estados Unidos, y agregó que sus resultados en el primer trimestre serán menores a los previstos por los analistas.
A esto se sumaron las advertencias del fabricante de software Oracle, que dijo que espera que sus beneficios en el trimestre fiscal terminado en mayo sean de 15 centavos de dólar por acción, dos centavos menos que lo esperado por los expertos; y de Computer Sciences, firma que dijo que no cumpliría sus previsiones de ganancias.
En el plano macroeconómico, los inversores siguen esperando la reunión del próximo 20 de marzo de la Reserva Federal (banco central), en la que se decidirá el futuro de las tasas de interés.
En la mañana de hoy se dio a conocer el índice de precios al por mayor, que mostraron un alza de 0,1% en febrero, y una baja de 0,3% al descontar productos de precio volátil.
Estas cifras alientan las esperanzas de una rebaja de tasas por cuanto demuestran que la inflación está bajo control y no representa un problema para la economía de Estados Unidos.
Para los inversores lo ideal sería que las autoridades decretaran una rebaja de 0,75 punto porcentual de la tasa interbancaria, desde el actual 5,5% a 4,75%, pues se cree que una baja de 0,5 punto ya está descontada por el mercado y que no causaría un efecto positivo en las bolsas.
Sin embargo, los analistas creen que el deseo de los inversores es sólo eso, un deseo, y que es muy poco probable, casi imposible, que la Reserva Federal rebaje los tipos más de medio punto.
(EFE).- Las bolsas de Nueva York cerraron hoy (viernes 16) con una fortísima tendencia a la baja, que completa la peor semana de negocios, medida en puntos, de la historia del promedio industrial Dow Jones.
Este promedio, el más importante de las bolsas de Nueva York, bajó 207,87 puntos (2,07%), hasta 9.823,41, la cifra más baja en los últimos 12 meses.
Con esta baja, sumada a las del lunes y el miércoles pasados, de 436 y 317 puntos, respectivamente, el Dow Jones completa una caída de 821 puntos (7,71%) en las cinco sesiones de la semana.
Esta caída semanal es la mayor de la historia del Dow Jones, medida en puntos, pues supera los 805 puntos (7,25%) que perdió en la segunda semana de abril de 2000, la anterior marca de pérdidas semanales.
Sin embargo, en términos porcentuales, la baja de la presente semana no figura dentro de las más importantes en la historia del mercado, y sólo ocupa el lugar 44 dentro de las más fuertes caídas.
Con todo, los inversores sintieron con rudeza el golpe de las caídas de lunes, miércoles y viernes, días en que las advertencias de empresas y las dudas sobre el futuro de la economía estadounidense afectaron mucho a los mercados.
Por otra parte el Nasdaq, mercado electrónico en que cambian de manos la mayor parte de las acciones de empresas de nuevas tecnologías, informática e Internet, bajó 49,80 puntos (2,56%), hasta 1.890,91 puntos, la cifra más baja desde noviembre de 1998.
En la semana el Nasdaq perdió 162 puntos (7,9%).
El S&P500, promedio que tiene en cuenta la evolución de 500 empresas bajó hoy 23,03 puntos (1,96%), hasta 1.150,53 puntos, mientras el New York Stock Exchange (NYSE), que incluye todos los títulos tradicionales de Wall Street, retrocedió 6,34 puntos para colocarse en 592,61.
El volumen de negocios fue bastante muy alto, de unos 1.548 millones de acciones, producto de que hoy fue día de triple cierre de operaciones con futuros y opciones de acciones.
Entre los títulos que cambiaron de manos 996 subieron, 2.049 bajaron y 221 se mantuvieron sin cambios.
Los bonos del Tesoro a 30 años subieron de precio y su tasa, que se mueve en sentido inverso al valor, bajó a 5,27% desde 5,28% del cierre de ayer jueves.
Las bolsas han sido afectadas en las últimas sesiones por una serie de advertencias de empresas del sector de las nuevas tecnologías, las previsiones económicas de Japón y Europa y las dudas sobre el futuro de la economía estadounidense y del futuro de las tasas de interés.
El fabricante de computadoras Compaq informó anoche que decidió despedir a 5.000 empleados, 7% de su plantel, como una forma de reducir sus gastos para poder afrontar la desaceleración económica en Estados Unidos, y agregó que sus resultados en el primer trimestre serán menores a los previstos por los analistas.
A esto se sumaron las advertencias del fabricante de software Oracle, que dijo que espera que sus beneficios en el trimestre fiscal terminado en mayo sean de 15 centavos de dólar por acción, dos centavos menos que lo esperado por los expertos; y de Computer Sciences, firma que dijo que no cumpliría sus previsiones de ganancias.
En el plano macroeconómico, los inversores siguen esperando la reunión del próximo 20 de marzo de la Reserva Federal (banco central), en la que se decidirá el futuro de las tasas de interés.
En la mañana de hoy se dio a conocer el índice de precios al por mayor, que mostraron un alza de 0,1% en febrero, y una baja de 0,3% al descontar productos de precio volátil.
Estas cifras alientan las esperanzas de una rebaja de tasas por cuanto demuestran que la inflación está bajo control y no representa un problema para la economía de Estados Unidos.
Para los inversores lo ideal sería que las autoridades decretaran una rebaja de 0,75 punto porcentual de la tasa interbancaria, desde el actual 5,5% a 4,75%, pues se cree que una baja de 0,5 punto ya está descontada por el mercado y que no causaría un efecto positivo en las bolsas.
Sin embargo, los analistas creen que el deseo de los inversores es sólo eso, un deseo, y que es muy poco probable, casi imposible, que la Reserva Federal rebaje los tipos más de medio punto.