viernes, 27 de diciembre de 2024

Ofensiva francesa contra los fondos de cobertura

spot_img

Antes de la sesión preparatoria del G-20 (este viernes), Christine Lagarde –ministra de hacienda, vieja enemiga de los derivados- presiona por mayor control sobre el segmento. Para empezar, exige más activos reales por cada dólar virtual que generen.

<p>Imponer a bancos, bancas de inversi&oacute;n y fondos especulativos inmovilizar m&aacute;s capital o activos reales por cada contrato es todav&iacute;a tab&uacute; para el Banco de Inglaterra (Mervyn King), la Reserva Federal (Benjam&iacute;n Bernanke) y el Banco Central Europeo (Jean-Claude Trichet). Pero Francia quiere que la Eurozona y otras econom&iacute;as centrales &ndash;Estados Unidos, Gran Breta&ntilde;a- ejerzan mayor supervisi&oacute;n en el sector m&aacute;s vol&aacute;til de la especulaci&oacute;n global.</p>
<p>Seg&uacute;n la propuesta de Lagarde, cuya g&eacute;nesis data de hace un a&ntilde;o, los bancos de todo tipo deber&aacute;n satisfacer requerimiento de capital m&aacute;s altos. Vale decir, reflejo de los riesgos intr&iacute;nsecos que encarnan los fondos de cobertura y otras franjas, por ejemplo, el capital extraburs&aacute;til dedicado a compras apalancadas. Obviamente, los bancos resistir&aacute;n medidas que les dificulten reunir liquidez en estas turbulencias.</p>
<p>La ministra present&oacute; un borrador de medidas ante el Eurogrupo, el pasado fin de semana. Pero apuntaba, en realidad, a la cumbre del G-20 (Londres, 2 de abril), donde los ortodoxos pesan menos y su propuesta tendr&aacute; mayor peso. Para empezar, hay un bloque cr&iacute;tico a los instrumentos derivativos, donde act&uacute;an &ndash;entre otros- Alemania, China, Brasil e India. Argentina podr&iacute;a figurar, si tuviese funcionarios interesados en el tema.</p>
<p>Naturalmente, el borrador franc&eacute;s es cuestionado por un &ldquo;lobby&rdquo; a medida. Lo integran grupos brit&aacute;nicos, norteamericanos y holandeses &ndash;piden menos regulaci&oacute;n, claro-, respaldados por el BdeI, el BCE y el propio Eurogrupo (Jean-Claude Junker). Este cabildeo pivotea sobre una tesis muy peligrosa: los reguladores nacionales no pueden imponer mayores exigencias de capital a intermediarios globales. Exactamente lo contrario de la tesis lanzada en 1982 por James Tobin.&nbsp;&nbsp; </p>
<p>&nbsp;</p>

Compartir:

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img

Noticias

CONTENIDO RELACIONADO