Con la economía mundial en recesión, se ha instalado un gran pesimismo sobre las oportunidades de negocio. Se prevé que el producto interno bruto mundial (PBI) disminuya aproximadamente en 2% en 2009 después de 4,8% registrado hace dos años. La cautela prevalece en el mercado, los puestos de trabajo se cierran, las inversiones se están reduciendo progresivamente y el crédito es escaso. Sin embargo, en este escenario se da una situación que va contra la ntuición y es que también puede ser un buen momento para iniciar un negocio.<br />
<br />
"Algunas de las compañías más importantes en la actualidad se iniciaron en medio de una recesión económica", explica Vinnie Aggarwal, <em>Chief Ecomonist</em> de Frost & Sullivan's (http://www.frost.com). "16 de las 30 empresas que componen el promedio industrial del Dow puede decir eso sobre sus orígenes". General Electric se inició durante el pánico de 1873, y la Gran Depresión vio el nacimiento de Hewlett Packard. Ejemplos más recientes incluyen Supercuts, galletitas Famous Amos y Microsoft, que comenzaron sus actividades durante la inestable década de1970. Sun Microsystems, Compaq Computer Co., y Adobe Systems iniciaron sus operaciones en la recesión de<br />
la década del ochenta. "Las épocas de inestabilidad ofrecen oportunidades únicas para iniciar un negocio exitoso", dice Aggarwal. "Las recesiones cambian la forma en que las empresas operan, los clientes consumen, y los competidores compiten, y todo eso puede resultar ventajoso para un negocio nuevo."<br />
<br />
Una característica fundamental de las recesiones es que se interrumpe el ritmo normal de la economía, y esto también presenta una oportunidad única que las nuevas empresas pueden aprovechar. Existe la necesidad urgente de nuevas ideas y soluciones para hacer frente a los desafíos críticos en el mercado.<br />
<br />
Dado que las empresas buscan reducir sus presupuestos, aumenta la demanda de alternativas de bajo osto, sobre todo porque los clientes tradicionales reconsideran y muchas veces abandonan su lealtad a determinadas marca en la búsqueda de alternativas más económicas. Los competidores potenciales son también susceptibles de verse debilitados por la recesión, lo que presenta una nueva oportunidad para penetrar en sus mercados.<br />
<br />
En estas situaciones, además, las empresas se abocan a los fundamentos básicos de sus negocios. En épocas de auge, cuando las condiciones crediticias son mejores, es más fácil conseguir financiación para emprendimientos novedosos, pero en una recesión económica los empresarios deben afinar su proyección y desarrollar planes de negocio más sólidos para el futuro.<br />
<br />
"Hay, también, un grupo más amplio de candidatos para elegir, ya que muchos de los talentos más destacados del momento buscan nuevas oportunidades", agrega Aggarwal. "Por otra parte, las empresas tienen más probabilidades de tener un equipo de trabajo más sólido en el comienzo de sus operaciones, en tanto los empleados toman una actitud más comprometida con el éxito del proyecto". "Crear una empresa y comenzar un negocio siempre es difícil, independientemente de las circunstancias económicas", concluye Aggarwal. "Iniciar un negocio durante una recesión no es más difícil y, además, ofrece un conjunto de oportunidades únicas, permitiendo estar un paso adelante cuando la recesión sea superada una nueva etapa de auge comience."
Este podría ser un buen momento para comenzar un negocio
Según Frost & Sullivan.