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Los empleadores creían que era poco considerado despedir a alguien en viernes, por ejemplo, porque la persona quedaría todo el fin de semana sin poder lanzar su búsqueda laboral. Y lo último que se quiere es un ex empleado rumiando furia todo el fin de semana. <br />
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Los tiempos cambian, pero algunas cosas no cambian nunca. Sigue siendo importante desarrollar una fuerte justificación para un despido. Sigue siendo importante tener un buena comunicación con el empleado den todo momento hasta que la interrupción del empleo se vea como última solución posible. Siempre me preocupa cuando leo carteles como éste actualmente en el HR Forum. La empresa que lo publica tiene que terminar el empleo de un trabajador y dice que la persona no sabe que se viene el despido.<br />
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El empleado siempre debe saber que se viene. Aún en el caso de despidos masivos, la gerencia debería haber estado comunicando problemas y asuntos para que los empleados no estén totalmente en la luna. Los temas de rendimiento que conducen a la terminación de un empleo siempre deberían ser claramente comprendidos. Un plan de mejoramiento de desempeño (PIP, según siglas inglesas) podría ser el último recurso de comunicación en el esfuerzo por comunicarse con el empleado. <br />
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Pero no siempre sirve un PIP. En el caso, por ejemplo, de un gerente con actitud negativa, es posible que usted haya perdido la fe en su capacidad o habilidad para dirigir. Y, por su jerarquía, su negatividad afecta a muchos otros empleados. Ningún PIp va a arreglar esa situación. A veces es mejor que se vayan aun cuando haya que pagarles mucha indemnización. <br />
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Algunas consideraciones para despedir a un empleado
Algunos de los detalles que los empleadores cuidadosos han considerado con respecto al despido de un empleado han cambiado en los últimos años debido a la proliferación de recursos online que tienen quienes buscan empleo.