<p>En un escenario donde 72% de las empresas están preocupadas por el nivel de deuda pública de sus países, y 43% está muy o extremadamente preocupada, una nueva encuesta de KPMG International revela que el recorte del gasto público es el método más popular para administrar la deuda. Según la encuesta, “<em>Paying the Bill</em>” (Pagando las cuentas) publicada por KPMG International, siete de cada 10 de los 538 empresarios encuestados en todo el mundo opinaron que la deuda pública debería reducirse principalmente a través de recortes en el gasto público.</p>
<p>Entre los aspectos del gasto público que se deberían recortar, los sueldos del sector público aparecen como la principal opción (53%), seguidos por el gasto en defensa (47%) y los subsidios al bienestar social (34%) . “Los pedidos de recortes en el gasto público no son un fenómeno nuevo en momentos de dificultades económicas”, afirma Loughlin Hickey, líder global de la práctica de Impuestos de KPMG International. “Sin embargo, estos recortes de gastos son siempre difíciles de implementar, sobre todo cuando quienes sufren el principal impacto son los propios empleados del Gobierno".</p>
<p>Cabe destacar que en la mayoría de los países se respaldó la inversión pública en infraestructura; tan sólo 24% de los encuestados seleccionó la reducción de estas inversiones como una opción para administrar la deuda.</p>
<p><strong>La visión de los empresarios argentinos</strong></p>
<p>Consultados acerca de los factores que llevaron a la recuperación luego de la recesión, 79% de los empresarios en la Argentina mencionó en primer lugar la reactivación de las exportaciones y 43% el aumento del consumo. 36% optó por la reducción en las tasas de interés y las medidas de estímulo del Gobierno fueron señaladas tan sólo por 14% de los empresarios. Sin embargo, se observa una ambivalencia respecto de los estímulos fiscales, pues 30% de los encuestados opinó que las medidas del Gobierno deben mantenerse al menos un año más y 35% cree que los estímulos deben eliminarse ni bien termine la recesión. “A escala global, los empresarios coinciden en que para mantener la recuperación económica se debe incrementar el consumo en los distintos países. Pero a la hora de decidir cómo debe incentivarse el consumo y mantener las expectativas es donde empiezan a diferir las opiniones. En la Argentina, la mayoría de los empresarios encuestados sostuvo que se debían mantener los estímulos a generar mayores exportaciones porque gracias a las exportaciones se generaría un <em>boom</em> del consumo. Y esto es lo que sucedió. Lo que sí ha dividido la opinión es si estos incentivos se deben mantener en el tiempo o si hay que cortarlos inmediatamente”, explica Rodolfo Canese Mendez, socio de Impuestos de KPMG en la Argentina.</p>
<p>Con un nivel de deuda que asciende a 48% del PBI, cifra que se mantiene igual desde 2008, los empresarios argentinos opinan que está muy claro lo que el Gobierno debería hacer al respecto. 95% de los encuestados cree que debe recortarse el gasto público y 25% quiere que el Gobierno cubra el servicio de deuda y salde los pagos de intereses al mismo tiempo. Existe menor consenso respecto de las áreas del gasto público en las cuales deberían hacerse los recortes. La mayoría de los encuestados (37%) apunta a los sueldos, mientras que en segundo lugar aparece el gasto social (26%) y sólo 11% cree que deben recortarse los gastos en infraestructura. “La opinión mayoritaria a escala mundial es que hay que reducir el gasto público, pero cuando se pregunta en qué se debe focalizar la reducción del gasto surgen distintas opiniones. Lo que desprende de este informe es que claramente la Argentina está en línea con la tendencia global de reducción o eficientización del gasto público", agrega Canese Mendez.</p>
<p><strong>La recaudación impositiva</strong></p>
<p>No es de sorprender que la recaudación impositiva sea la opción menos popular para administrar la deuda pública. La encuesta revela que una pequeña cantidad de los encuestados aceptaría un aumento en los impuestos si éste se realizara con el único propósito de cancelar la deuda, y no como parte de la tributación general. A escala global, 19% de los encuestados respaldó esta idea, transformándola en la tercera opción más popular después de reducir el gasto público y de encontrar otras alternativas al aumento impositivo. “Salvo que los Gobiernos se conformen con aceptar los niveles actuales de deuda y trabajen para cumplir con los pagos de intereses (una opción que fue seleccionada por 16% de los encuestados), no tendrán más opción que aumentar los impuestos de una forma u otra”, explica Hickey.</p>
<p>“Los cambios en las tasas impositivas son herramientas que utilizan los Gobiernos a fin de alivianar sus deudas. De hecho, durante la última década, KPMG ha documentado que, a escala global, la tendencia a gravar las ganancias corporativas va siendo lentamente reemplazada por la tendencia a gravar impuestos indirectos, lo que parece haberse acelerado durante este año”, dice Hickey. “Al comienzo de agosto de 2010, notamos que al menos 10 países planeaban aumentar las tasas de IVA o demás impuestos a los bienes y servicios. Asimismo, otros dos países, China e India, planean introducir nuevos sistemas de impuestos al consumo entre 2010 y 2013".</p>
<p>El informe también reveló que los encuestados coinciden ampliamente en que las tasas de los impuestos a las empresas, al consumo (IVA e impuestos sobre bienes y servicios) y a las ganancias personales en sus países deberían permanecer alrededor de los porcentajes actuales o quizás un poco por debajo. Respecto de los impuestos a las empresas, en Latinoamérica 36% optó por una tasa de entre 20% y 30%, arrojando un promedio de 24% comparado con el promedio de tasa real de la región de 27%. Respecto de los impuestos al consumo, las opiniones arrojaron un promedio de 12%. En el caso de los impuestos personales con tasas más altas, los empresarios consultados eligieron una gran variedad de opciones de entre 10 y el 40%.</p>
<p>“Las pruebas sugieren que el contrato básico entre los Gobiernos y las empresas es prácticamente el mismo en todo el mundo, en lo que respecta al nivel de servicios prestados para un nivel de pago aceptable,” dice Hickey. “Las diferencias surgen cuando consideramos lo que las diferentes culturas creen que los Gobiernos deberían hacer y cómo se debería financiar esta actividad".</p>
<p><strong>Acerca de la encuesta</strong></p>
<p>De la encuesta participaron 538 directores ejecutivos y otros ejecutivos <em>senior</em> de compañías que operan en una gran variedad de industrias con ingresos anuales que van desde menos de US$ 1000 millones a más de US$ 5000 millones en 26 países: la Argentina, Australia, Bélgica, Brasil, Canadá, Chile, China, República Checa, Francia, Alemania, Hong Kong, Hungría, India, Irlanda, Italia, Japón, México, Países Bajos, Polonia, Rusia, Singapur, Eslovaquia, España, Suiza, Reino Unido y Estados Unidos.</p>
La administración del gasto público, según encuesta de KPMG
Siete de cada diez líderes del sector empresarial en el mundo quieren que la deuda pública se reduzca a través de recortes en el gasto público. En la Argentina, 95% opina en la misma línea y la mayoría cree que para ello deberían recortarse los sueldos del sector público.