<p>Cierta gente y ciertas organizaciones funcionan mejor cuando todos los límites y todos los roles están claramente definidos. Aman la “job description” o descripción de la tarea y quieren ordenadas estructuras de reporte. Para esa gente, vivir en ambigüedad, con objetivos poco claros en un ambiente permanentemente cambiantes es vivir en el infierno. Despertar a diario para descubrir competidores nuevos, nuevas leyes, nuevas tecnologías y terminologías es tentarlos a volver a la cama nuevamente.</p>
<p>Pero, como todos sabemos, la vida no es así. Especialmente no en la era digital y de los nuevos medios. Y en ese mundo confuso, el marketing virtual se está convirtiendo en marketing en la vida real, o marketing IRL. <br />
En primer lugar, la mente humana tenía necesidad de convertir en categoría lo “digital”, reconociendo sus diferencias. Durante varios años, el marketing digital fue considerado un capítulo señarado del marketing tradicional. Sin embargo, cada vez más a medida que avanzamos, será virtualmente imposible distinguir un territorio del otro: o sea que el marketing digital (o marketing virtual) se convertirá en equivalente de marketing IRL.</p>
<p><em>El marketing móvil, entre lo real y lo virtual</em><br />
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En la era digital y de los nuevos medios lo que comienza siendo un encuentro virtual se transforma luego en un encuentro en la vida real. Tomemos por caso el de conocer gente. Se dice en uno de cada seis casamientos en Estados Unidos comenzó como una cita online. A veces tenemos dificultad en recortar si a una persona la encontramos en Facebook, en un cóctel de la empresa, en Linkedin o en una cena de amigos comunes. <br />
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En este ambiente, el marketing se encuentra en una encrucijada. Los marketineros digitales van a tener que acostumbrarse a esta difusa demarcación entre los virtual y lo real. El gran motivo es “lo móvil”. Estaremos siempre conectados a donde sea que vayamos, y en el camino también. Todas las cosas, en última instancia, estarán conectadas. Un email, un sms, un mensaje en Facebook o una llamada por Skype, todo ocurrirá a través de la misma terminal en el teléfono inteligente; de ahí la necesidad de obtener el programa en m- marketing o marketing móvil. En última instancia, todo será virtualmente real y realmente virtual. Los que lo entiendan y estén cómodos viviendo en esos borrosos confines estarán en condiciones de crear marcas fuertes y marketing vibrante. <br />
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Marketing realmente virtual o virtualmente real
Los marketineros digitales van a tener que acostumbrarse a una difusa demarcación entre los virtual y lo real donde la gente se encuentra tanto a través de dispositivos como en ambientes de la realidad. En todas partes y en todo momento, el marketing deberá tener presencia.