<p>En un período prolongado de debilidad económica, es fácil para los líderes de negocios concentrar su atención en los desafíos externos de macro nivel que tienen delante: inseguridad política y regulatoria, consumidores volubles, precios de los commodities en aumento y menor crecimiento del PBI en las economías emergentes. Cada sector, a su vez, tiene sus propios desafíos e incertidumbres. A las empresas farmacéuticas se les vencen patentes de medicamentos clave para sus ingresos; la industria química está cambiando por el florecimiento repentino del gas shale; la banca minorista ya no es más un negocio de altos márgenes y la industria aeroespacial comercial, el duopolio Boeing–Airbus sufre con el surgimiento de nuevas compañías de China, Rusia y Canadá.<br />
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Pero no todo son factores externos, también hay internos. En los buenos tiempos y en los malos, algunas empresas triunfan y otras no. El éxito está determinado en gran medida por la combinación particular de capacidades, la combinación de procesos, herramientas, conocimiento, habilidades, capital humano y formas de organización que despliegan las empresas. Por eso es que, especialmente en años difíciles, todo líder de empresa debería preguntarse si tiene las capacidades que necesita para salir a ganar en su sector. <br />
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Todas las empresas necesitan por lo menos dos tipos de capacidades. El primer grupo son pre-requisitos para entrar al sector. Thomas Hummard, profesor de la Kellogg School of Management, las llama “necesidades competitivas. Por ejemplo, toda empresas de productos para el consumo debe manejar una cadena de suministro; toda petrolera debe cumplir con requisitos de seguridad y ambientales; todo operador de telecomunicaciones debe desarrollar y mantener en forma confiable su tecnología de redes. <br />
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El segundo grupo está conformado por las capacidades distintivas: esas son únicas para la identidad de cada empresa, ligadas a su estrategia y difícil de copiar para sus competidores. Las decisiones de inversión, el modelo operativo y la combinación de productos y servicios que sostienen esas capacidades distintivas. En las empresas triunfadoras, todo eso se combina en un sistema con capacidades que se refuerzan entre sí, definen lo que la empresa hace bien y se aplican explícitamente a todo lo que hace: a cada producto y servicio que ofrece, a cada mercado en el cual entra y a cada operación que realiza. Sea en el sector aeronavegación, productos para el consumo o telecomunicaciones, las compañías que logran crear un sistema de esta naturaleza quedan invariablemente mejor posicionados para ganar a sus competidores.</p>
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Las condiciones para ganar
Cada negocio afronta sus propios desafíos en el entorno económico incierto y turbulento de 2012. Se mencionan aquí dos sistemas de capacidades que ayudan a preparar el terreno para el crecimiento de los negocios y el desarrollo en casi cualquier sector de la producción.
