De acuerdo a un estudio realizado por Ibarómetro, la compañía elegida para ver los partidos ha demostrado ser la familia en primer lugar (65%), y en segundo, los amigos (13%). Casi todos prefieren juntarse en una casa (94,3%) en lugar reunirse en un bar o club y 50,6% de organiza las reuniones el mismo día, casi a último momento.
42% de la población sostiene que la bebida que mejor representa al fútbol argentino es la cerveza, especialmente para los jóvenes (51%), porque es la que les gusta a todos (40%) y es para compartir (39%).
Entre los aspectos por los cuales el mundial resulta tan atractivo, se destaca el hecho de poder mostrar al mundo el orgullo de ser argentinos, elegido por 41% de los consultados, y supera considerablemente aspectos como ser la competencia deportiva más grande del mundo (19%) o la oportunidad perfecta para reunirse con familiares y amigos (16%), entre otros.
El mundo offline se vive en familia, pero en las redes sociales los jóvenes conectan las distintas “canchas”. Más de 40% de los jóvenes entre 18 y 35 años, durante el partido chatea con amigos por Whatsapp, Facebook o mensajes de texto, y 37% incluso comparte estados y fotos las redes sociales como Instagram, Facebook y Twitter.
A diferencia de la opinión de los hinchas en Buenos Aires, en el interior uno de cada cuatro admite apelar a las cábalas para reforzar la esperanza, especialmente los cordobeses (31%). Las más adoptadas son ver todos los partidos en el mismo lugar y no cambiar de asiento.
Otra diferencia en cuanto a los rituales es que en el interior, los nervios se procesan cantando, mientras que el resto de los encuestados que admite ver el partido en un clima silencioso donde sólo se comentan las jugadas importantes.
Respecto al optimismo de ser campeones del mundo, siete de cada 10 ven a la Argentina como triunfadora y los hinchas mendocinos son quienes más refuerzan su convicción (78,4%).
