sábado, 23 de noviembre de 2024

Efectos económicos del ébola

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Además de le enorme y trágica pérdida de vidas humanas, la epidemia de ébola está teniendo efectos devastadores en esas economías en una cantidad de sectores esenciales: detiene el comercio, daña la agricultura y asusta a los inversores.

 marzo de 2014 más de 3.000 personas han muerto  por el avance del virus del Ébola en los países del África occidental de Guinea, Sierra Leona, Liberia y Nigeria.   A pesar de esfuerzos sobrehumanos y profesionales médicos en esos países, los decrépitos sistemas de salud, que ya estaban notoriamente débiles aun antes de que comenzara la epidemia, y la falta de instalaciones, equipos y personal médico no han logrado parar el avance de la enfermedad en esos países.

 

Antes de que se iniciase el brote del ébola, esos países  estaban logrando un progreso económico notable, especialmente Sierra Leona y Liberia. En 2013, estos dos países ocupaban el segundo y sexto lugar  entre los 10 países con más crecimiento del PBI. Guinea, si bien crecía más lentamente a 2,5% en 2013 tenía muchas expectativas de crecimiento que se basaban en el proyecto de hierro Simandou. Sin embargo,  al ser afectados estos proyectos mineros por el ébola y la caída de los precios, los inversores internacionales interesados aún no se deciden a concretar nada.

 

Efectos económicos de la epidemia

 

Además de le enorme y trágica pérdida de vidas humanas, la epidemia de ébola está teniendo efectos devastadores en esas economías en una cantidad de sectores esenciales: detiene el comercio, daña la agricultura y asusta a los inversores.

 

Restricciones a la movilidad, comercio y transporte. Para detener el contagio del virus, los países más afectados por el ébola han implementado cuarentenas en áreas donde el riesgo de infección es alto, mientras que  países vecinos como costa de marfil y Senegal han impuesto restricciones al movimiento de personas y productos, incluyendo cierres de fronteras. Esas medidas, a su vez, han reducido el comercio interno y regional, el transporte y, por supuesto, el turismo. Pero como las estadísticas oficiales de comercio  no captan el comercio informal, el impacto estimado que propone el Banco Mundial podría estar  omitiendo la enorme reducción  del comercio informal debido a limitaciones a la movilidad.  Si bien estas acciones se proponen romper la cadena de transmisión, el presidente de sierra Leona las ha llamado un “bloqueo económico” que ha significado menos producción y menos ingresos para el gobierno.

 

Agricultura. Según la FAO (Food and Drug Administration), la agricultura representa 57% del PBI de Sierra Leone, 39% del de Liberia, 20% del de Guinea y 22% del de Nigeria. Las interrupciones que se produjeron en la temporada de siembra al declararse la enfermedad,  van disminuir los rindes  de arroz y maíz (alimentos básicos para la población) durante la época de cosecha entre octubre y diciembre. Ya el precio de la mandioca en algunos lugares de Liberia ha subido 150% según la FAO.

 

 

Minería e inversión. La actividad minera constituye 14% de la economía de Liberia y aproximadamente 17% de la de Sierra Leona) está disminuyendo luego de las restricciones a los viajes no esenciales y a la repatriación de personal. Algunos mineros en Sierra Leone y Liberia tienen miedo de entrar en zonas de alto riesgo y varias firmas han suspendido las operaciones o enviado de vuelta a algunos trabajadores extranjeros. Las inversiones se posponen y algunas se cancelan si se percibe que el riesgo es demasiado grande.

 

El sector financiero. Aunque el sector financiero no figura por lo general en el panorama de la epidemia, vale la pena notar que si los grandes depositantes retiran fondos, los bancos podrían afrontar  serios problemas de liquidez. Además, si algunos tomadores de créditos no pagan, el número de préstamos malos aumentará t resultará en algunos incumplimientos. De manera que el manejo de la liquidez también debe ser una prioridad y los bancos deben monitorear con cuidado su cartera de préstamos. En última instancia, la pérdida de confianza en el sistema financiero es el principal factor de riesgo y debería evitarse. Finalmente, la fuga de3 capitales es otro riesgo para el sistema financiero, especialmente cuando las tasas de intercambio se han vuelto más volátiles.

 

El temor al contagio reduce la actividad económica

 

Lo que llama la atención sobre los efectos de la epidemia sobre las economías de África Occidental es que el factor que más influye  en limitar la actividad económica es el miedo.  El Banco Mundial lo dice así: “Los mayores efectos económicos de la crisis  no resultan de los costos directos, sino de la conducta generada por el temor al contagio.  Esto a su vez lleva a un miedo a la asociación con otros y reduce la participación de la fuerza laboral, cierra lugares de empleo, altera el transporte y motiva a miembros del sector público y privado  a cerrar puertos y aeropuertos.”

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