Los accionistas, felices. Costolo es CEO desde 2010 y desde hace tiempo le cuestionan los resultados y el magro crecimiento de usuarios y de ingresos, especialmente desde el momento en que la compañía comenzó a cotizar en bolsa en 2013.
Aunque él dice no compartir estas preocupaciones, en un comunicado hecho hoy a los inversores, su partida se produce a menos de dos meses del desalentador informe de ganancias.
En cuanto se conoció la noticia de su alejamiento las acciones de Twitter subieron 7%, pero luego volvieron a bajar.
Aunque Twitter es una plataforma con más de 300 millones de usuarios activos al mes, viene luchando para generar el tipo de ingresos que justifique su valor de mercado, que supera los US$ 23.000 millones. A Costolo le ha resultado muy difícil manejar las expectativas de los inversores y muchos de ellos vienen pidiendo su cabeza desde hace bastante tiempo.
Pero, al irse, se va rico. Él no había negociado un paracaídas de oro (esos paquetes de dinero que se negocian junto con el contrato) para el caso que renunciara. Pero los accionistas, felices con su partida, le han dado US$ 11 millones como regalo de despedida.
Eso es porque Costolo es dueño de muchas acciones de Twitter y ahora esas acciones valen todavía más. Los papeles de Twitter subieron casi 3% en las horas anteriores a que abriera el mercado el viernes luego de la noticia de su partida. Costolo tiene actualmente unos 8,2 millones de opciones de acciones y otras 822.545 acciones del capital, lo que significa, para él alrededor de US$ 11,2 millones.