Nike tomó la delantera en adopción de nuevas técnicas de producción, pero New Armour y Adidas le pisan los talones. Desde 2015 Nike viene trabajando con Flex, la compañía de fabricación de alta tecnología para introducir más automatización en el proceso de fabricar una zapatilla. Hoy, las instalaciones de Flex en México se han convertido en las fábricas más importantes de Nike, responsables no solo de una parte cada vez más grande de la producción de la marca sino también de una serie de innovaciones en toda la base de proveedores de Nike, como pegado automatizado y cortes con rayo láser.
Para Nike el cambio hacia una mayor automatización tiene dos grandes atractivos. El primero es que baja los costos y promete mayores márgenes de ganancias. El segundo es que la compañía puede entregar nuevos diseños con más rapidez. ¿Qué significa esto para los mercados en desarrollo?malas noticias, sin duda. Durante l os últimos 20 años Nike fue uno de los pioneros en traslado de producción a los mercados del mundo en desarrollo. Ahora, con la inclusión de robots, el proceso industrial ya no necesita realizarse en países de ultramar.
Nike afirma que las mayores ventas le permitirán profundizar la automatización manteniendo su actual fuerza laboral. Pero la compañía es una de las empleadoras multinacionales más grandes del mundo con más de 493.000 obreros de línea en 15 países. Luego tiene fábricas contratadas que emplean a 1 millón de trabajadores en 42 países. Las ventajas de aumentar automatización son inmensas. No solo en costos sino en la necesidad de mantenerse al ritmo de las exigencias de los consumidores.
Todo el negocio del vestir estará observando el desarrollo de lo que pasa con Nike.