GE pagó más de US$ 6.000 millones en honorarios a bancos de Wall Street desde que comenzó el siglo 21, eso a pesar de que su valor de mercado cayó 80% en el mismo período. La historia de negociaciones del conglomerado industrial fue cuestionada el lunes cuando la compañía declaró que descontaría US$ 23.000 millones del valor de su división energética luego de un desalentador desempeño de los negocios que compró en 2015 cuando incorporó Alstom.
Esta última crisis se desencadena en momentos en que GE está en pleno proceso de desmembramiento del conglomerado luego de largos años de adquisiciones. Durante mucho tiempo GE fue una máquina de comprar, haciendo acopio de negocios de bienes industriales, medios, salud y servicios financieros. Durante el mandato de Jack Welch la compañía se diversificó en los 80 y 90: compró la cadena de televisión NBC y armó un gigantesco brazo financiero. Luego de la crisis de 2008 y comenzó su período de adelgazamiento.
Las relaciones de la compañía con JPMorgan se remontan a 1892, cuando John Pierpont Morgan organizó la fusión de Thomas Houston International Electric y Edison General Electric.
Jimmy Lee, el famoso banquero de JPMorgan que falleció en 2015, mantuvo la conexión con el sucesor de Jack Welch, Jeffrey Immelt, quien manejó la compañía durante 16 años. Lee aconsejó la venta de su participación en NBC y también la de sus activos en el brazo financiero de GE.
El flamante despedido Flannery admitió en entrevista con la CNBC que el precio pagado por Alstom fue excesivo y la compra no resultó.
La compañía ahora trae a PJT, un banco boutique de inversión, para que asesore en asuntos estratégicos. Son los problemas en la unidad financiera de GE los que mantienen a la compañía muy atada a sus asesores financieros, que son los que les facilitan el acceso a los mercados de capitales cuando sus balances arrojan problemas.
Jack Welch, el origen de todo
Flannery fue el CEO número 11 cuando fue nombrado el año pasado. Ahora se convirtió en el primer líder con mandato inferior a dos años. Su reemplazo, Lawrence Culp, aunque miembro del directorio de GE desde abril, es el primer outsider en liderar el grupo de 126 años de edad y, por lo tanto, el primero que se recuerde que no ha sido moldeado por la máquina de fabricar líderes que es GE.
Cuando las empresas salen a buscar afuera un líder que no pertenece a sus líneas gerenciales suele ser una señal de que necesitan un cambio radical. En efecto, muchas de las dificultades estructurales de GE se remontan a Jack Welch, quien se retiró en 2001, y a John Flannery, el antecesor de Jeffrey Immelt.