Los datos recopilados durante 2025 muestran un cambio clave en las prioridades de las PyMEs: el foco dejó de estar en mantener la estructura propia y pasó a estar en la eficiencia operativa. Este cambio ha generado resultados concretos: las empresas que tercerizaron sus operaciones logísticas lograron ahorros de hasta un 30% en costos fijos mensuales.
La autogestión de almacenes y la falta de herramientas adecuadas generaban problemas serios, como diferencias de inventario que llegaban al 15% y limitaban la capacidad de crecimiento. Al adoptar modelos de almacenamiento flexible y entregar la gestión a expertos, las PyMEs lograron incrementar su volumen de operaciones hasta un 50%.
Este aprendizaje sienta las bases para 2026, un año que se proyecta con mayor competencia debido a la apertura de importaciones. En este nuevo escenario, el diferencial no estará solo en el producto, sino en el precio y la calidad del servicio de entrega.
Para el sector, la lección de 2025 es que la inversión debe ser práctica y adaptada a la realidad local. Las grandes innovaciones globales, como drones o vehículos autónomos, requieren inversiones que hoy son difíciles de justificar en Argentina.
Tomás Palomeque, socio-fundador de 3PL, subraya esta idea: “Hoy, las empresas chicas y medianas buscan sobre todo eficiencia operativa, previsibilidad en los costos y reducción de tiempos. Creemos que lo más inteligente es invertir en tecnología aplicada al contexto argentino, con la problemática y la coyuntura de un país en desarrollo. El principal riesgo es invertir en tecnología que no tiene retorno en el mercado local, como la IA avanzada, que aún requiere infraestructura y regulaciones en análisis”.
De cara al próximo año, el camino a seguir pasa por cuatro puntos esenciales:
- Tercerización: Seguir delegando la logística para eliminar costos fijos y convertir gastos operativos en variables controlables.
- Optimización: Usar sistemas de gestión simples para un control de stock rápido y preciso.
- Trazabilidad: Ofrecer seguimiento en línea de cada pedido, mejorando el control y la calidad del servicio al cliente.
- Cumplimiento de Tiempos: Entregar en los plazos acordados es fundamental para la fidelización del cliente.
En conclusión, la competitividad de las PyMEs argentinas no dependerá de tecnologías futuristas, sino de la adopción de modelos de gestión pragmáticos. La tercerización estratégica y la digitalización simple pero efectiva serán los pilares para escalar y diferenciarse en un mercado más abierto y exigente.












