SpaceX concretó un nuevo lanzamiento de su cohete Falcon 9 en la madrugada del martes 6 de octubre, desde la plataforma SLC-40 de la Estación Espacial de la Fuerza Aérea en Cabo Cañaveral, con el propósito de desplegar 28 satélites adicionales de la constelación Starlink. Con este vuelo, la compañía celebra su noventa misión Starlink en lo que va del año 2025.
El despegue se produjo a las 2:46 a.m. EDT (06:46 UTC). Unas ocho minutos después, el cohete logró la maniobra de aterrizaje automatizada sobre el buque robotizado A Shortfall of Gravitas, correspondiente al primer bloque de la etapa reutilizable. La plataforma ha alojado ya 127 aterrizajes, y este vuelo representa el número 515 de recuperación de boosters en la historia de la empresa.
El pronóstico meteorológico había otorgado un 65 % de probabilidad de condiciones favorables, aunque la preocupación principal radicaba en las rachas de viento al momento del lanzamiento y la presencia de nubes cúmulo. Las previsiones indicaban que la actividad de lluvias podría disminuir antes de la apertura de la ventana de lanzamiento.
El propulsor utilizado fue el bloque B1090, que cumplía su octava misión. Entre sus participaciones anteriores figuran vuelos Crew-10, CRS-33 y Bandwagon-3.
Comparativa con Kuiper: disparidad en volumen y velocidad
En contraste con la intensidad operativa de Starlink, el proyecto Kuiper de Amazon ha registrado hasta el momento un volumen mucho más modesto de lanzamientos en 2025. Según fuentes oficiales del proyecto, la serie de despliegues comenzó en abril de 2025 con 27 satélites lanzados en la misión KA-01.
Durante junio de 2025, una segunda misión (KA-02) también llevó a cabo el lanzamiento de otros 27 satélites mediante el vehículo Atlas V. Posteriormente, Kuiper empezó a emplear cohetes Falcon 9 para sus despliegues: en julio realizó la misión KF-01, con 24 satélites, y en agosto otra similar (KF-02) también con 24 unidades.
En total, hasta mediados de 2025 Kuiper ha completado cuatro lanzamientos de producción (dos con Atlas V y dos con Falcon 9), con un total de aproximadamente 102 satélites desplegados.
Este ritmo es infinitamente menor al de Starlink. Mientras SpaceX ha ejecutado 90 lanzamientos sólo para su red Starlink en este año —sin contar otras misiones comerciales— Kuiper apenas cuenta con unos pocos vuelos. En este contexto, la diferencia en escala y velocidad de despliegue entre ambos competidores queda claramente expuesta.
Implicaciones estratégicas y retos futuros
El hecho de que SpaceX haya alcanzado ya 90 misiones Starlink en 2025 evidencia su dominio operativo en cuanto a capacidad de lanzamiento y repetibilidad de reutilización. Este volumen confiere ventajas de escala en costos, agilidad operativa y refinamiento técnico acumulado.
Kuiper, por su parte, avanza con un enfoque más gradual. Amazon ha contratado más de 80 lanzamientos para desplegar su constelación total, que pretende alcanzar más de 3.200 satélites. Sin embargo, su calendario hasta ahora muestra una progresión cautelosa, posiblemente condicionada por factores de producción, financiación o coordinación logística con proveedores de lanzamientos.
En el mercado de internet satelital, la velocidad de despliegue es un elemento clave: cuanto más rápido se complete la constelación, antes será viable competir en cobertura, latencia y servicio con Starlink. En ese sentido, la gran ventaja de SpaceX reside no sólo en su volumen de vuelos, sino en la madurez operativa de su sistema de lanzamientos reutilizables.
A mediano plazo, Kuiper deberá acelerar su ritmo si pretende acercarse en términos de cobertura global y presencia en mercados emergentes. Cada mes de rezago representa potenciales clientes cautivos para Starlink.
