El futuro de la democracia

    Hay un intenso y no resuelto debate sobre la democracia en todo el mundo, y también en nuestro país. Sobre qué significa hoy este concepto, cuál es la fortaleza de sus cimientos y si cambiará o sobrevivirá en los años por venir. Muchos se preguntan si en una era, donde el cambio científico, tecnológico, económico y social, es vertiginoso, permanecerán intactas las viejas nociones aprendidas de Montesquieu y Tocqueville.

    Estamos habituados a pensar que hay un correlato armonioso entre la vigencia democrática y el crecimiento económico. Hasta que uno se tropieza con China, que supone una excepción gigantesca.

    La democracia se identifica siempre con la realidad de una mayoría que respeta los derechos de las minorías, y que cuenta con mecanismos de representación orgánica como los partidos políticos, elecciones y parlamentos. Pero además –como bien lo recordaba un reciente ensayo de Dani Rodrik– donde también existen poder judicial y medios de comunicación independientes del poder circunstancial. Sin estos mecanismos, existe la posibilidad de que se instale una dictadura de la mayoría.

    En la Argentina, además, la discusión tiene aristas propias. Durante la segunda mitad del siglo pasado, cuando estuvo vigente la democracia, fue un duelo permanente por el poder en el PJ y la UCR. Todos los partidos tienen una reconocida presencia en la Constitución Nacional reformada en 1994. Sin embargo, siete años después, la gente salió a las calles a gritar “Que se vayan todos”. Todo indica que ni la UCR, ni el PJ como tal, se han recuperado de ese sismo.

    Como lo decía Mercado en septiembre de 2007 (“Se acabó la democracia”): “A la hora de votar, los ciudadanos deben elegir de un menú corto, compuesto por autocandidatos o candidatos designados por pequeñas camarillas. En todo caso, la gente interviene (indirectamente) a través de las encuestas. Ellas son una suerte de servicio meteorológico: nos dicen qué tiempo hace ahora, y formulan pronósticos de corto plazo”. 

    En esta fascinante aventura intelectual que supone cada edición aniversario de Mercado, el eje se ha puesto esta vez en este tema; “El futuro de la democracia.”

    Una investigación conjunta de Carlos Fara y Asociados, con Mercado, intenta dar cuenta del estado de situación en este tema. Habrá dos encuestas, una entre público general y otra en el universo de empresarios en la base de datos de Mercado.

    Su buscará contestar respuestas como qué es lo más importante dentro de una democracia; cuál es el país que mejor –y peor– representa los valores de la democracia; si hay acuerdo o en desa­cuerdo con quienes afirman que, a pesar de sus defectos, siempre es preferible vivir en ella; y si existe una mejor alternativa, entre otros interrogantes.

    Los resultados serán acompañados por claves para su interpretación y por los testimonios de académicos y de personalidades de la vida pública local.

    En el mundo, las encuestas mundiales señalan un continuo aumento de países democráticos en el mundo. Como contrapartida, muchos Gobiernos democráticos no han funcionado con eficiencia, sin lograr crecimiento con inclusión, y han despertado sospechas sobre su futuro.

    En la versión 2014 del IMD World Competitiveness Rankings, se advierte que entre las 15 economías más competitivas del planeta, cuatro no se consideran democracias plenas (Singapore, Hong Kong, UAE, y Malasia). Lo que plantea el vínculo que existe entre competitividad y sistemas políticos. La conclusión: hay vinculación directa entre democracia y prosperidad.

    Canasta básica del ejecutivo

    Algo que hicimos por última vez en 2007, vuelve a reeditarse y con ánimo de convertirse en un producto periodístico anual.

    No pensamos pelearnos con el Gobierno ni crear el índice paralelo del costo de vida del Indec. Pero así como la tradicional canasta básica del Indec analiza en qué rubros y en qué proporción un asalariado consume su sueldo, en este caso la búsqueda apunta a identificar cómo se clasifican y descomponen, en porcentajes, los gastos de este segmento tan particular que son los directivos de empresas.

    Así como hay una canasta básica de la población, la intención de Mercado es construir un nuevo índice que mida los consumos calificados de gerentes y directivos de empresa, que tienen características intrínsecas diferentes a las del resto de la población.
    Hay gastos que se vinculan directamente con la actividad laboral que les toca desempeñar y hay patrones de comportamiento diferenciales.
    Con el respaldo de Total Argentina Strategic, y el soporte técnico de Trucking Panel, se ha diseñado esta encuesta que apunta a caracterizar los grandes rubros de consumo del hombre de empresa, revelando hábitos y costumbres que no son siempre conocidos o identificados.