Por Carina Martínez
Del lado uruguayo de la zona termal que incluye las ciudades entrerrianas de Colón, Federación y Villa Elisa, entre otras, se emplaza el complejo hotelero cinco estrellas Altos del Arapey Club de Golf & Hotel Termal; a 60 km de la ciudad uruguaya de Salto y a 85 km de la frontera con Argentina, tras pasar el puente internacional Salto Grande, en la ciudad entrerriana de Concordia.
El hotel fusiona un inmenso predio con lagunas, bellísimos jardines, una construcción en bloques que armoniza con el entorno –proyecto del arquitecto Miguel Bono–, un complejo de seis piscinas y jacuzzis de aguas termales, spa, un campo de golf de 18 hoyos y una completa oferta de opciones para relajarse, divertirse y disfrutar a pleno.
Con lujo sin estridencias y una propuesta de la más alta calidad, en todos los sentidos, Altos del Arapey se posiciona como uno de los hoteles más premiados de la región. Desde su inauguración, en 2013, ha cosechado un sinfín de distinciones, principalmente de los sitios especializados en turismo y votados por los propios huéspedes, como Tripadvisor, Booking y Despegar.
El complejo cuenta con un pozo propio de unos 950 metros de profundidad, que abastece de aguas termales a las piletas externas, la interna, los jacuzzis, las duchas de las habitaciones y que, incluso, se ofrece como bebida, fría o caliente.
El agua llega a 40 grados centígrados, aunque la temperatura de las piletas se regula en función de la época del año.
Además del placer de sumergirse en aguas cálidas –en verano, hay opciones de agua fría– los beneficios de las termas son múltiples. Permiten proteger y restaurar la salud, mejorar la piel y energizarse, gracias a la potente ionización y mineralización. Las piletas se recargan con habitualidad, lo cual garantiza la calidad de las aguas termales y mantiene sus propiedades mineromedicinales.
Piletas comunicadas y bordes infinitos
En el centro del establecimiento, se ubican cinco de las seis piscinas de agua termal, abiertas y comunicadas entre sí –una de ellas pensada para niños y niñas–, un gran jacuzzi y un “wet bar”, que ofrece tragos, jugos y licuados. Estas piscinas, emplazadas en un jardín con vistas a lagunas y al río Arapey, funcionan hasta las 22 horas. Al frente del hotel, de cara al campo de golf, el Club House y una capilla de piedra de cuento de hadas, se ubica la piscina cerrada “in–out”, disponible las 24 horas, ideal para disfrutar de los atardeceres, las noches estrelladas y la tranquilidad de un entorno natural privilegiado.
Las 156 habitaciones –entre ellas 20 suites– están distribuidas en módulos y se destacan por la calidad de su mobiliario, las amplias dimensiones, las vistas y los balcones, hacia los jardines, las lagunas o la cancha de golf.
Las instalaciones también incluyen un salón de eventos, un completo spa, que ofrece distintos tipos de tratamientos y masajes (con costo extra), un gimnasio con máquinas de última generación, dos jacuzzis interiores y sala de yoga.
Relax y diversión, para todas las edades
Un equipo de profesionales del Departamento de Animación está a disposición de niños, jóvenes y personas adultas, para quienes se desarrollan distintas actividades guiadas.
El Kids Club es un valor agregado fundamental, ya que ofrece a los más pequeños espacios de diversión guiada y supervisada, tanto diurnos como nocturnos. Talleres de pintura, baile, disfraces, maquillaje, juegos de mesa, caminatas, pesca, futbolito, carreras y cine son algunos de los entretenimientos que se organizan.
Los más peques tienen un espacio especial de recreación y actividades artísticas. Los más grandes cuentan con una sala de juegos, con ping pong, metegol, pool y juegos de mesa, y con salas de Wii, de PlayStation, de computación, de lectura y un microcine.
Además, para quienes gusten aventurarse y sumar diversión a los días de relax, se ofrecen paseos en jeep, en canoas, a caballo y en bicicleta, clases de golf para principiantes, yoga, aquagym, aquavoley y aquabásquet en las piscinas y entretenimiento por las noches, con bingo, música, baile, karaoke y shows en vivo.
La frutilla del postre
Bajo un sistema de “Todo Incluido”, la propuesta gastronómica del resort, a cargo del chef ejecutivo Charles Vieira, es extremadamente variada y busca complacer a todos los paladares y requerimientos alimentarios.
El establecimiento cuenta con una sala de desayunos y restaurante, un snack bar (que opera de 10 a 00 h) y un wet bar en la piscina central, todos con vista panorámica.
En el desayuno, destacan las variedades de jugos, licuados, cereales, waffles, omelettes, frutas frescas, fiambres, panificados y pastelería, con propuestas sin tacc, para celíacos.
Para el almuerzo y la cena, el buffet ofrece un salad bar, con verduras frescas de estación, especialidades frías y calientes y exquisiteces, como pulpitos, salmón ahumado, jamón crudo de Parma, quesos de leche de cabra y de oveja, sushi, espárragos y langostinos. Las materias primas son frescas y seleccionadas, de productores locales.
A su vez, hay cuatro islas de “show cooking”, con platos que se preparan en el momento, a la vista y de acuerdo a la preferencia de los comensales. Pastas, pescados, parrilla (que comienza a preparase desde temprano en la mañana) y pizzas al horno son los clásicos. Los sorrentinos de camarones, de calabaza o de jamón y queso forman parte de los platos preferidos por los comensales, quienes pueden elegir qué agregar a su salsa y armar el plato a su medida.
A la hora de cerrar una experiencia gourmet de deleite, la mesa dulce es particularmente atractiva, con postres bellamente decorados, flanes, tortas, helados, frutas secas, frescas y en almíbar, a los cuales es difícil resistirse.
Las bebidas incluyen gaseosas, cócteles, cervezas, vinos nacionales, licuados, jugo de naranja exprimido o bien agua termal helada.
Como si fuera poco, de 10 am hasta la medianoche, el snack bar ofrece variedades de café expreso, tés, submarinos, cócteles, gaseosas, jugos y cervezas, para acompañar medialunas rellenas, tostados y una variedad de exquisiteces de panadería y pastelería, con propuestas también para celíacos. Opciones que pueden degustarse en el bar interior, el deck o en las reposeras que acompañan las charlas interminables y maridan con los momentos de distensión, en un ambiente en que el tiempo parece detenerse.
Opciones diferenciales
Altos del Arapey ofrece una propuesta atractiva para distintos públicos. Familias, grupos de amigos, parejas, e incluso el segmento corporativo; para cada cual, una alternativa. Además, en fechas especiales, como Día de la Primavera, Navidad, Fin de Años e incluso Halloween, se preparan fiestas especiales, con ambientación, propuestas gastronómicas y de diversión adaptadas a la ocasión.
Por otra parte, a pesar de que “desenchufarse” es siempre la mejor opción, para quienes no pueden hacerlo al 100%, no todo está perdido. Aunque el emplazamiento del lugar es agreste y alejado del mundanal ruido, el resort ofrece una conectividad eficiente en la mayoría de los espacios, algo no menor en los tiempos veloces que corren.
Entre el segmento corporativo, se posiciona como un lugar ideal para eventos y congresos, ya que cuenta con dos salas de conferencias (200 y 180 personas en auditorio), sala de apoyo (40 personas) y sala de espectáculos (250 personas) con gran terraza a la laguna.
