Comenzó como soluciones tecnológicas principalmente para la fertilidad y el embarazo: por ejemplo, al principio, apps como Clue y Natural Cycles, que utilizaban datos y conocimientos para ayudar a las mujeres a realizar un seguimiento de sus ciclos menstruales, dominaban el sector.
De hecho, explica el informe de la consultora Trendsity, una app como Eli –que empodera a las mujeres para que comprendan su cuerpo y las transiciones por las que atraviesa todos los días y a lo largo de la vida- recibió US$ 1.5 millones para seguir creciendo. El dispositivo usa saliva para capturar las fluctuaciones hormonales en el hogar y brinda a las mujeres la información que desean para decidir sobre fertilidad y salud.
Sin embargo, la salud integral de la mujer llega mucho más lejos: bienestar sexual, el embarazo y atención materna, el manejo de enfermedades, e incluso problemas relacionados con la salud mental también son el alcance de nuevas aplicaciones. Si el sector quiere seguir creciendo necesita entender el alcance de las necesidades de la mujer en un sentido más amplio y hay una nueva ola de empresas que está apuntando en ese sentido, con el ciclo hormonal en el centro.
El monitoreo tecnológico de datos biométricos ha ido en aumento conforme la salud es un campo cada vez más atravesado por la tecnología. Las pulseras de rendimiento, fitness trackers o las propias aplicaciones de muchos teléfonos ya permiten hacer seguimientos estrictos de múltiples indicadores de la salud pero lo que aparece como tendencia es la propia medición de la salud hormonal para optimizar las rutinas de ejercicio físico.
Por ejemplo, Nike lanzó Cycle, un circuito de ejercicios dentro de la app Nike Training Club ajustados a las fases del ciclo menstrual, así como consejos de nutrición. The Curve es un programa de ocho semanas que propone “biohacks hormonales” para mejorar el rendimiento y la recuperación. Otra app, Aavia, informa acerca de cómo la hormonalidad durante el ciclo afecta al tono muscular y los niveles de energía.
Lo que aparece como posibilidad para marcas y nuevos servicios es capturar el deseo de personalización extrema y posibilitar lograr mayor bienestar a la medida de cada persona. El ejercicio físico y la administración de la energía forman parte de la salud entendida de manera holística, por lo que el mercado tiene mucho más para crecer en una sociedad donde tanto la productividad como el bienestar aparecen muy valorados y a veces difíciles de articular. Marcas deportivas, centros de salud, cadenas de gimnasios tienen la oportunidad de hacer enormes diferencias.