Esta hazaña significa que la empresa logró muy bien superar la ausencia de su fundador, Steve Jobs. A pesar de una pandemia que cortó las cadenas globales de suministro y afectó negativamente a los consumidores Apple pudo seguir produciendo y vendiendo productos. Así demostró que su negocio es resiliente. Los inversores, además, esperan un aumento en las ventas cuando los clientes pasen a la tecnología 5G que seguramente vendrá incluida en los nuevos modelos de iPhone.
Lograr esa valuación pone de manifiesto también la capacidad de la compañía para prosperar aun en ausencia de Steve Jobs, el visionario que la llevó al éxito. Tim Cook, el actual CEO que asumió a la muerte de Jobs, logró aumentar el valor de la empresa más allá de lo imaginable.
Esto ocurre en momentos en que soplan vientos reguladores en Europa y también en Estados Unidos, donde la comisión antimonopólica del Congreso investiga si la compañía se comportó en modo anti-competitivo y dañando la innovación. Pero la presión regulatoria no alarmó a los inversores. Lo mismo ocurrió con Microsoft en los 90, cuando la compañía afrontaba juicios antimonopólicos mientras crecía el valor de sus acciones.
El negocio de Apple gira alrededor de su dispositivo más emblemático: el iPhone. Y en los últimos meses se aceleraron las ventas del teléfono , en parte debido a la salida del iPhone- SE, más barato.