Más consejos sobre los alimentos en la heladera
Es importante el lugar del refrigerador donde uno coloca cada cosa. No da lo mismo cualquier lugar. Un investigación concluye que casi todos nosotros ubicamos mal las cosas.
Por ejemplo, los productos lácteos no deben guardarse en la puerta, donde hay menos frío. La leche y el queso deben estar en los estantes de la mitad para abajo, donde el frío es mayor.
La revista inglesa Good HouseKeeping inició un debate sobre si conviene o no guardar el ketchup de tomate en la nevera. A partir de ahí inició una investigación para descubrir dónde conviene guardar cada alimento. El resultado indica que casi todos debemos cambiar radicalmente nuestros hábitos de almacenamiento alimentario.
Asda, que es el nombre con que Walmart opera en Gran Bretaña, dijo que pone el ketchup en heladeras y en estantes porque 54% de los compradores quieren que la salsa esté fría y 46% la prefiere a temperatura ambiente.
La revista averiguó la intensidad de frío en las distintas áreas de la heladera y también en sus estantes y la rapidez con que los alimentos se pasan. Cree que los condimentos deben estar en la puerta, los alimentos cocinados deben guardarse en el estante superior, los lácteos en el del medio , la carne cruda un estante más abajo y las verduras debajo de todo. También dice que el pan , la manteca de maní (que vendría a ser el equivalente a nuestro dulce de leche) y la salsa de soja pueden quedar en el armario mientras que las mermeladas, mostazas , aceites de nuez y jugo de limón deben ir en la heladera.
Algunas frutas y vegetales que “desprenden gases”, como las paltas, las bananas, los pelones (nectarinas), duraznos, peras, ciruelas y tomates deben ser mantenidos fuera de la heladera porque arruinan otros alimentos frescos.
La revista recomienda no poner nunca comida caliente en la heladera porque hace que la temperatura general suba y puede conducir a intoxicación alimentaria.
Este tema de dónde mantener ciertos alimentos divide a los expertos y también a los comerciantes. Muchos chefs famosos dicen que la gente se ha acostumbrado a refrigerarlo todo cuando frecuentemente no hay necesidad, pero los científicos prefieren inclinarse por la seguridad sacrificando, tal vez, algo del sabor.
