Por Rodrigo Hermida, vicepresidente de Legal Professionals LatAm en Thomson Reuters
Durante mucho tiempo, los profesionales de Legales fueron vistos como los guardianes del negocio, pero que a menudo frenaban el propósito organizacional. Ahora, enfrentan el desafío de proteger a la empresa, al mismo tiempo que deben potenciar su crecimiento.
El informe State of the Corporate Law Department 2025, realizado por el Thomson Reuters Institute, recopiló datos de más de 2.400 directores legales corporativos de 50 países y más de 200 líderes ejecutivos de grandes compañías, entre otros profesionales del sector.
El estudio revela que los equipos legales más exitosos se están reinventando como aliados estratégicos de la alta dirección, lo que representa una ventaja competitiva clara. En lugar de presentar obstáculos, los departamentos pueden integrar su conocimiento legal en la estrategia empresarial, facilitando la innovación y el crecimiento incluso en entornos cada vez más regulados.
Pilares para el departamento legal del futuro
Los datos del informe muestran que los directores legales mencionan en las entrevistas el concepto de valor tres veces más que el año anterior, lo que evidencia la importancia de alinear su trabajo no solo con las prioridades comerciales inmediatas, sino también con el propósito organizacional a largo plazo. Por eso, para avanzar en esta transformación, deben definir claramente su aporte al negocio y a la visión estratégica más amplia de la compañía, comunicándolo de manera efectiva, tanto interna como externamente.
Para participar de un verdadero asesoramiento estratégico es necesario construir una base sólida, armando equipos con talento y experiencia de alto nivel, que respondan a las necesidades actuales y puedan anticiparse a las del futuro. Estos profesionales deben tener un conocimiento profundo de la estructura y del sector donde operan y cultivar relaciones sólidas con los líderes clave para fomentar una comunicación fluida entre las áreas.
Pero con un tercio de los líderes enfocados en mejorar la eficiencia y un 20% en reducir costos, los equipos enfrentan el desafío de generar más impacto con recursos más limitados.
En este contexto, la tecnología surge como una aliada estratégica. Impulsando las prácticas de Legal Operations que modernizan la gestión legal, la incorporación de herramientas digitales en los departamentos legales permite automatizar tareas repetitivas para que los profesionales puedan concentrarse en el trabajo más estratégico. Estas soluciones estandarizan procesos, organizan datos para habilitar un trabajo más colaborativo y monitorean resultados en tiempo real, transformando radicalmente la operación del departamento legal.
Esta transformación tecnológica ya muestra resultados concretos en diversas organizaciones. Como señala Federico Martínez, director legal de una de las empresas líderes en servicios de internet, cable y telefonía en Argentina, Telecentro “La optimización en tiempos y recursos en el manejo contractual, en cuestiones societarias y la trazabilidad de información en relaciones de consumo, en pocas palabras significa que podemos mostrar el impacto de nuestro trabajo”.
Por eso, la verdadera transformación sucede cuando el departamento legal deja de verse como un gasto necesario y abraza un cambio que es tanto tecnológico como cultural. Más allá de incorporar tecnología, la evolución implica re imaginar completamente la función operativa: pasar de la mera acumulación de información a considerar los datos como activos estratégicos para la toma de decisiones, por lo cual el asesoramiento jurídico pueda actuar como facilitador de relaciones más ágiles y colaborativas con otras áreas.
En este escenario cada vez más impulsado por tecnología, será un gran desafío desarrollar el talento para impulsar la eficacia. Se van a necesitar nuevas habilidades y roles por las que los abogados no son tradicionalmente conocidos. Por eso será necesario buscar profesionales con antecedentes o intereses no tradicionales, una mentalidad orientada al análisis de datos, habilidades para la gestión de equipos high-tech y sobre todo una visión integral de la empresa y el negocio.
Retener el talento actual y repensar cómo serán los roles emergentes va a ser otra tarea crucial para garantizar esta alianza generadora de valor entre los departamentos legales y la alta dirección de las organizaciones.
La transformación de los equipos legales corporativos representa hoy una ventaja competitiva esencial para el éxito empresarial. ¿Y qué significa precisamente “éxito” para la alta dirección de las empresas? En el informe, el 72% lo define por la rentabilidad, el 65% por la satisfacción del cliente y el 59% por su retención. Para responder a estas prioridades, los directores legales deben demostrar su capacidad de generar valor agregado en un entorno cada vez más centrado en el cliente.
Con esta evolución, será posible no solo proteger a las empresas en el presente, sino también apoyarlas para acelerar el camino hacia el futuro.
Crédito de apertura: rawpixel.com en Freepick
