Piratearon la novela de Stephen King

A menos de dos semanas de su lanzamiento, el código de encriptado de Riding the Bullet fue crackeado, y la ofrecían gratis en la Red.

29 marzo, 2000

La novela “Riding the Bullet”, lanzada hace dos semanas exclusivamente en formato electrónico, a un precio de US$ 2,50, fue pirateada y ofrecida gratuitamente en la Red.
Len Kawell, presidente de Glassbook, uno de los editores que distribuyen el libro online confirmó que grupos de crackers habían descifraron el código de encriptado utilizado para proteger al libro de violaciones del derecho de copyright.

Esta semana se podían encontrar versiones en PDF desencriptadas en varios web sites, sin embargo, las autoridades se encargaron de cerrar la mayoría de ellos.

“La verdad es que no existe una cosa tal como un sistema de protección de copiado inviolable, hacerlo invencible y fácilmente utilizable es contradictorio”, dijo Kawell.

Cuando el libro fue lanzado, la clave del código de encriptado era de 40 bits, que es la mayor para productos exportables. Desde entonces la Glassbook lo modificó a 64 bits.

La importancia que los analistas le adjudican a este hecho no pasa por las pérdidas que haya sufrido la editorial, que se presume son ínfimas, sino a que la factibilidad de la piratería aleje a otros autores y editores de publicar libros online.

La novela “Riding the Bullet”, lanzada hace dos semanas exclusivamente en formato electrónico, a un precio de US$ 2,50, fue pirateada y ofrecida gratuitamente en la Red.
Len Kawell, presidente de Glassbook, uno de los editores que distribuyen el libro online confirmó que grupos de crackers habían descifraron el código de encriptado utilizado para proteger al libro de violaciones del derecho de copyright.

Esta semana se podían encontrar versiones en PDF desencriptadas en varios web sites, sin embargo, las autoridades se encargaron de cerrar la mayoría de ellos.

“La verdad es que no existe una cosa tal como un sistema de protección de copiado inviolable, hacerlo invencible y fácilmente utilizable es contradictorio”, dijo Kawell.

Cuando el libro fue lanzado, la clave del código de encriptado era de 40 bits, que es la mayor para productos exportables. Desde entonces la Glassbook lo modificó a 64 bits.

La importancia que los analistas le adjudican a este hecho no pasa por las pérdidas que haya sufrido la editorial, que se presume son ínfimas, sino a que la factibilidad de la piratería aleje a otros autores y editores de publicar libros online.

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