Microsoft: ¿no será Yahoo una huida hacia delante?

William Gates, en Davos, predicaba “usar las fuerzas del mercado para asistir a los necesitados”. De pronto, cambia de máscara y se lanza sobre Yahoo, en lo que Google califica como “maniobra semimonopólica”.

4 febrero, 2008

Como sostiene David Drummond –director jurídico de Google-, la propuesta de Microsoft “transgrede dos principios claves en internet: apetura e innovación”. Obviamente, el abogado refleja ideas de Lawrence Page e Serge Brin, creadores del megamotor de búsquedas.

Pero otros analistas, particularmente en Europa occidental ven esa oferta por US$ 44.600 millones algo así como una última carta de Gates, un escape hacia delante o, peor, un signo de declinación creativa. Por cierto, si existe un riesgo es el de un duopolio entre Google y Microsoft+Yahoo. A pocos meses de retirarse formalmente, Gates intenta cavar una última trinchera y detener a una compañía que dista de haber agotado su arsenal y constituye una amenaza terminal para Microsoft.

Brin y Page han construido una máquina de guerra formidable, basada en algoritmos, por ahora imposible de batir, aunque el combate se desarrolle en un segmento tan inestable como la publicidad virtual. En este contexto, la oferta no solicitada por Yahoo no pone de manifiesto arrogancia, sino reflejos defensivos. Desde hacía un año, Microsoft estaba tratando de unir fuerzas con Google, para no quedar reducido a los huecos de mercado que ésta le deje.

La nueva movida, entonces, tiene objetivos similares a viejas escaramuzas con Apple (Steve Jobs), al ataque mortal contra Nestscape o las maniobras restrictivas de mercado aprovechando el predominio de Windows. Pero hoy se trata de mera sobrevivencia, quizá porque la venta de software y patentes ya no sea la llave del futuro.

Como sostiene David Drummond –director jurídico de Google-, la propuesta de Microsoft “transgrede dos principios claves en internet: apetura e innovación”. Obviamente, el abogado refleja ideas de Lawrence Page e Serge Brin, creadores del megamotor de búsquedas.

Pero otros analistas, particularmente en Europa occidental ven esa oferta por US$ 44.600 millones algo así como una última carta de Gates, un escape hacia delante o, peor, un signo de declinación creativa. Por cierto, si existe un riesgo es el de un duopolio entre Google y Microsoft+Yahoo. A pocos meses de retirarse formalmente, Gates intenta cavar una última trinchera y detener a una compañía que dista de haber agotado su arsenal y constituye una amenaza terminal para Microsoft.

Brin y Page han construido una máquina de guerra formidable, basada en algoritmos, por ahora imposible de batir, aunque el combate se desarrolle en un segmento tan inestable como la publicidad virtual. En este contexto, la oferta no solicitada por Yahoo no pone de manifiesto arrogancia, sino reflejos defensivos. Desde hacía un año, Microsoft estaba tratando de unir fuerzas con Google, para no quedar reducido a los huecos de mercado que ésta le deje.

La nueva movida, entonces, tiene objetivos similares a viejas escaramuzas con Apple (Steve Jobs), al ataque mortal contra Nestscape o las maniobras restrictivas de mercado aprovechando el predominio de Windows. Pero hoy se trata de mera sobrevivencia, quizá porque la venta de software y patentes ya no sea la llave del futuro.

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades