<p>Las propias características tecnológicas, la labilidad y la mutabilidad de varios segmentos (redes sociales, motores de búsqueda, correo electrónico) son armas de doble filo. El auge irrefrenable de ciberpiratas y las guerras entre servicios secretos (Rusia versus Estonia o Letonia, Pakistán vs. India) ilustran claramente al respecto.<br />
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En ese contexto deben insertarse los regímenes totalitarios –China, Birmania, Sudán, Vietnam, Cuba, dictaduras africanas- o autoritarios, estilo Rusia, Bielorrusia, repúblicas de Asia central, Libia, Argelia y Venezuela. En los casos menos duros, simplemente se trata de gobiernos que controlan medios convencionales pero sin interferir en el ciberespacio.<br />
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Por ejemplo, la violencia social desatada hace meses por elecciones fraudulentas en Irán ha intensificado un régimen censor ya muy estricto. Pero la existencia de sistemas más democráticos (Turquía, Armenia, Adzerbaidyán, Líbano) o menos estrictos (Siria, Jordania, Irak) crea un colador que permite burlar a Teherán.<br />
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Pero existe una compleja situación paralela, Kurdistán. La etnia desborda su mayor núcleo, el sudeste de Turquía -donde su red de comunicaciones es controlada desde Angora-, hacia dos enclaves vecinos. El principal está en el noroeste de Irak, goza de autonomía y Bagdad no interfiere con la Red, que es mala palabra para los turcos. La segunda zona es el noroeste de Irán, un gobierno ambiguo respecto de los kurdos, debido a que son sunníes y no shiitas.<br />
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Birmania es un caso muy peculiar. Por un lado, la dictadura militar se enfrenta a los monjes theravada. Por otro, hay todo un sistema para comercio de opiaceos en el “triángulo de oro”. El gobierno reprime duramente a los opositores religiosos y políticos, pero es cómplice del narcotráfico y opera en tándem con los señores de la guerra afganos. Otro caso curioso es Dubai, emirato donde es ilegal emplear Internet para criticar la especulación inmobiliaria y financiera. <br />
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Lugares del mundo poco propicios para Internet
En materia de censura por la Red, China no está sola ni mucho menos. La acompaña un elenco donde militan, entre otros, Irán, Birmania, Cuba, Saudiarabia, Bielorrusia, Sudán, Zimbabwe, Gabón, Dubai, Türkmenistán, Kazajstán, y un largo etcétera.