La lámpara de silicio, promesa para el 2010

La compañía canadiense Group IV Semiconductor Inc. ha desarrollado una tecnología revolucionaria que a partir de 2010 permitirá fabricar lámparas que duran 20 años y consumen 90% menos de energía que las actuales actuales.

22 diciembre, 2006

En el proyecto participan también EnCana Corporation y Sustainable Development Technology Canada (SDTC). El foco de luz incandescente apenas ha cambiado desde que su invención hace más de 100 años. Fue adquiriendo más eficiencia, mejoró sus propiedades en la lámpara halógena y han aparecido propuestas más ecológicas que permiten el ahorro de energía, pero aún queda mucho por mejorar.

Actualmente, el foco de luz incandescente consta de un filamento de tungsteno muy fino, encerrado en una ampolla de vidrio en la que se ha hecho el vacío o que ha sido rellenado con un gas inerte para evitar que el filamento se volatilice por las altas temperaturas que puede alcanzar.

Pero esta lámpara incandescentes, a pesar de ser de la más popular por su bajo costo y su color de luz, sólo convierte en luz visible 15% de la energía consumida, por lo que su eficiencia resulta muy baja.

Limitaciones de las lámparas de bajo consumo

Hoy existen focos de bajo consumo, también fluorescentes, que duran 15 años y consumen cinco veces menos energía que las clásicas bombillas incandescentes. Y aunque su utilización está bastante extendida, todavía no ha sido asimilada completamente debido a ciertas limitaciones.

Estas lámparas de bajo consumo, por ejemplo, necesitan un tiempo para alcanzar la intensidad de luz que pueden emitir, lo que es un problema cuando se necesita usar poco tiempo (por ejemplo para subir una escalera).

Tampoco se pueden tirar a la basura porque contienen polvos fluorescentes y un gas de vapor de mercurio que la convierten en un producto de desecho delicado. Finalmente, el rendimiento cromático de estas lámparas es menor que el de un foco incandescente, que tiene un espectro de luz más completo.

Reducir el consumo eléctrico mundial

La nueva tecnología es algo completamente innovador, porque se ha logrado producir luz pasando la corriente a través del silicio. Dado que la casi totalidad de la energía es convertida en luz y no calor, esta tecnología hará que los focos fabricados con este sistema consuman la décima parte de la energía que consumen los tradicionales y duren mucho más tiempo.

El futuro foco utiliza semiconductores en vez de gas — como los fluorescentes actuales– o filamentos — como los focos incandescentes. La nueva lámpara, según sus creadores, permitirá reducir el consumo de la energía a nivel mundial, según informa la SDTC.

El objetivo de sus creadores es doble: que tengan un precio que haga que las lámparas sean accesibles para el público masivo y que sean compatibles con las instalaciones actuales. Group IV aspira a revolucionar el mercado global de la iluminación, estimado en 12.000 millones de dólares.

Beneficios del silicio

Las nuevas lámparas tendrían una duración potencial de 50.000 horas, frente a las 1.000 de las bombillas incandescentes y las 5.000 de los fluorescentes; además, serán de una calidad y cantidad de luz excelentes.

Utilizaran las instalaciones corrientes que se usan en la actualidad y tendrán un costo de fabricación bajo gracias al uso del silicio.
Como no levantarán calor, se podrán usar en vidrieras o congeladores. También se podrán tocar sin peligro de quemarse, aunque estén encendidas.

En el proyecto participan también EnCana Corporation y Sustainable Development Technology Canada (SDTC). El foco de luz incandescente apenas ha cambiado desde que su invención hace más de 100 años. Fue adquiriendo más eficiencia, mejoró sus propiedades en la lámpara halógena y han aparecido propuestas más ecológicas que permiten el ahorro de energía, pero aún queda mucho por mejorar.

Actualmente, el foco de luz incandescente consta de un filamento de tungsteno muy fino, encerrado en una ampolla de vidrio en la que se ha hecho el vacío o que ha sido rellenado con un gas inerte para evitar que el filamento se volatilice por las altas temperaturas que puede alcanzar.

Pero esta lámpara incandescentes, a pesar de ser de la más popular por su bajo costo y su color de luz, sólo convierte en luz visible 15% de la energía consumida, por lo que su eficiencia resulta muy baja.

Limitaciones de las lámparas de bajo consumo

Hoy existen focos de bajo consumo, también fluorescentes, que duran 15 años y consumen cinco veces menos energía que las clásicas bombillas incandescentes. Y aunque su utilización está bastante extendida, todavía no ha sido asimilada completamente debido a ciertas limitaciones.

Estas lámparas de bajo consumo, por ejemplo, necesitan un tiempo para alcanzar la intensidad de luz que pueden emitir, lo que es un problema cuando se necesita usar poco tiempo (por ejemplo para subir una escalera).

Tampoco se pueden tirar a la basura porque contienen polvos fluorescentes y un gas de vapor de mercurio que la convierten en un producto de desecho delicado. Finalmente, el rendimiento cromático de estas lámparas es menor que el de un foco incandescente, que tiene un espectro de luz más completo.

Reducir el consumo eléctrico mundial

La nueva tecnología es algo completamente innovador, porque se ha logrado producir luz pasando la corriente a través del silicio. Dado que la casi totalidad de la energía es convertida en luz y no calor, esta tecnología hará que los focos fabricados con este sistema consuman la décima parte de la energía que consumen los tradicionales y duren mucho más tiempo.

El futuro foco utiliza semiconductores en vez de gas — como los fluorescentes actuales– o filamentos — como los focos incandescentes. La nueva lámpara, según sus creadores, permitirá reducir el consumo de la energía a nivel mundial, según informa la SDTC.

El objetivo de sus creadores es doble: que tengan un precio que haga que las lámparas sean accesibles para el público masivo y que sean compatibles con las instalaciones actuales. Group IV aspira a revolucionar el mercado global de la iluminación, estimado en 12.000 millones de dólares.

Beneficios del silicio

Las nuevas lámparas tendrían una duración potencial de 50.000 horas, frente a las 1.000 de las bombillas incandescentes y las 5.000 de los fluorescentes; además, serán de una calidad y cantidad de luz excelentes.

Utilizaran las instalaciones corrientes que se usan en la actualidad y tendrán un costo de fabricación bajo gracias al uso del silicio.
Como no levantarán calor, se podrán usar en vidrieras o congeladores. También se podrán tocar sin peligro de quemarse, aunque estén encendidas.

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