Greenpeace obligado a no protestar
Los miembros de la organización ecologista protestaban encadenados a un barco por el transporte de carbón y la consecuente emisión de dióxido de carbono a la atmósfera.
(EFE).- Los 15 miembros de Greenpeace que desde el pasado sábado permanecen encadenados al barco de la organización La Paloma, en el puerto de Rotterdam, en protesta por el transporte de carbón, recibieron ayer (lunes 13) la orden de abandonar inmediatamente la acción.
La protesta de Greenpeace responde a una campaña contra el uso de carbón ya que en su combustión emite grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2), principal causante del efecto invernadero.
Esta manifestación coincide con la celebración en La Haya de la Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP6), que estudia los mecanismos para reducir las emisiones contaminantes.
La portavoz de Greenpeace, Annette Cornelisse, señaló que la orden de autoridades portuarias puede suponer la prohibición definitiva de entrar en el puerto de Rotterdam a cualquier barco de este grupo ecologista.
Añadió que la intención de los miembros de Greenpeace es continuar su acción aunque reconoció que “físicamente va a ser difícil”.
(EFE).- Los 15 miembros de Greenpeace que desde el pasado sábado permanecen encadenados al barco de la organización La Paloma, en el puerto de Rotterdam, en protesta por el transporte de carbón, recibieron ayer (lunes 13) la orden de abandonar inmediatamente la acción.
La protesta de Greenpeace responde a una campaña contra el uso de carbón ya que en su combustión emite grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2), principal causante del efecto invernadero.
Esta manifestación coincide con la celebración en La Haya de la Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP6), que estudia los mecanismos para reducir las emisiones contaminantes.
La portavoz de Greenpeace, Annette Cornelisse, señaló que la orden de autoridades portuarias puede suponer la prohibición definitiva de entrar en el puerto de Rotterdam a cualquier barco de este grupo ecologista.
Añadió que la intención de los miembros de Greenpeace es continuar su acción aunque reconoció que “físicamente va a ser difícil”.
