Comercial del Plata
Hagan juego
En lo que constituye el mayor crédito concedido por la institución
al sector privado, después de los otorgados al grupo Yoma, el Banco de
la Nación aprobó un préstamo de US$ 50 millones a Sociedad
Comercial del Plata, de la familia Soldati. Según fuentes del banco,
el crédito está garantizado por acciones de las empresas gasíferas
del grupo, que se encuentran en proceso de venta. En el grupo Soldati se limitan
a comentar que el préstamo es de largo aliento (aunque no hablan de plazos
ni tasas) y que se destinará a cancelar deudas.
Comercial del Plata, que ha emprendido la retirada del negocio energético,
concentra ahora sus esfuerzos en la reestructuración de los negocios
de Tren y Parque de la Costa. Santiago Soldati cree que, para que los números
cierren, la única salida pasa por la explotación de un casino
en el Tigre. Lo cual explica sus frecuentes viajes a La Plata para conseguir
el permiso que debe firmar, en definitiva, el gobernador Eduardo Duhalde.
Aclaración
Misioneros con experiencia
En el informe sobre el negocio de los colectivos, publicado en MERCADO de
febrero pasado (páginas 92 a 97), se señaló que “la empresa
La Nueva Metropol (línea 65), adquirida por un grupo inversor misionero,
fue la única en pasar a manos de un operador ajeno al negocio”. Al respecto,
Eduardo V. Zbikoski, presidente y propietario de ese grupo empresario, dirigió
una nota a la Redacción aclarando que ese holding, que es “de
carácter familiar”, está en el negocio, en la provincia de Misiones,
“desde 1964”.
Fate/Aluar
La crisis y
la familia
Además de los 49 juicios cruzados que aún mantiene con sus primos
Madanes, descendientes de Manuel (el fundador de Fate y Aluar), Javier Madanes
Quintanilla, hijo del fallecido Adolfo y a cargo de los destinos del grupo,
se enfrenta ahora a un nuevo problema familiar. Su madre, Dolores Quintanilla,
quien ostenta el cargo de presidenta honoraria, y tiene en su poder la mitad
de las acciones, comenzó a cuestionar en voz alta, puertas adentro de
la firma, el actual estilo de conducción. Sus críticas apuntaron,
más precisamente, a los ajustes de personal y costos que se aplican en
Fate y Aluar.
La señora, de 81 años, española de nacimiento (llegó a la Argentina huyendo del régimen franquista), interrumpió sus vacaciones cuando se enteró de las suspensiones en la firma de neumáticos que, con US$ 60 millones en exportaciones a Brasil, se ha visto severamente castigada por la crisis del real. Aluar también sufre por la drástica caída internacional del precio del aluminio.
De la Rúa
Estrategia brasileña
Pese a que la Alianza cuenta con su propio equipo de economistas, liderado
por José Luis Machinea, el candidato presidencial Fernando de la Rúa
parece confiar más en las percepciones de un político dedicado
a las cuestiones económicas. Antes de la reunión del foro de Davos,
en febrero, envió al secretario de Hacienda de la Ciudad, Eduardo Delle
Ville, a recorrer las calles y las empresas de San Pablo para elaborar un discurso
sobre la crisis brasileña.
Eso parece explicar por qué De la Rúa apostó, en sus discursos públicos, a que Brasil saldrá rápido de la crisis, mientras que el gobierno nacional fue inicialmente al choque.
De la Rúa se entusiasmó con esta estrategia y envió nuevamente a su emisario a Brasil antes de reunirse con el presidente Fernando Henrique Cardoso el 9 de marzo. Su discurso tampoco varió, pese a la presión del economista Roberto Lavagna, que insistía en tratar de arrancarle a Brasil alguna concesión para los industriales argentinos.
Otra interna
El canciller
de
Duhalde
A medida que se acercan las elecciones, crecen las disputas por los futuros
cargos. Es el caso de la interna desatada por el puesto de canciller de Eduardo
Duhalde. Las preferencias parecían claramente orientadas hacia Rodolfo
Gil, esposo de la encuestadora Graciela Romer, y a cargo de los contactos externos
del gobernador bonaerense.
Pero, de golpe, se produjo un vuelco a favor de Juan Carlos Olima, ex vicecanciller,
diplomático de carrera e integrante del círculo íntimo
del influyente diputado Jorge Remes Lenicov.