En 1972, cuatro empleados veinteañeros de la filial alemana de IBM presentaban al gigante de la computación un proyecto
para desarrollar programas estandarizados para mainframes que se ocuparan de administrar aplicaciones de negocios. Ante
la frustración de la iniciativa, los jóvenes decidieron establecerse por su cuenta. Así nació un producto el sistema R/2
que en poco tiempo se convertiría en la piedra fundacional de la empresa alemana SAP AG.
A 23 años de ese afortunado fracaso, y gracias al éxito obtenido primero por el R/2 y desde 1992 por el R/3, un paquete de
herramientas y aplicaciones que le permitió pegar el salto de los mainframes a las computadoras personales, SAP se
convirtió en el primer proveedor de software de negocios que logró superar la barrera de los US$ 1.000 millones en ventas
mundiales, desplazando a gigantes de la especialidad, como Oracle y Lotus.
Hoy SAP está presente en 41 países, emplea a 6.200 personas y el R/3 se utiliza en cerca de 3.300 compañías. La empresa
desembarcó en la Argentina en octubre de 1994, de la mano de SAP América, la subsidiaria norteamericana que tiene a su
cargo el desarrollo de negocios en las regiones de Latinoamérica y Oceanía.
Conducida por el alemán Klaus Besier, SAP América es la principal responsable del crecimiento sostenido en las ventas de
la empresa madre. El estratégico posicionamiento que Besier y los suyos lograron para el R/3 en el mercado norteamericano
instaló a SAP entre las top-five en ventas de software general.
Y mucho de ese éxito asegura Besier estuvo ligado a la suerte que tuvimos con nuestro sentido de la oportunidad. La
reingeniería es el ingrediente clave en el acelerado incremento experimentado en las ventas de SAP. Los negocios están
buscando caminos para coordinar y perfeccionar procesos que permitan distribuir servicios mejorados y faciliten el trabajo
de los empleados. El suceso logrado por SAP consistió en hacer del R/3 la esencia de los negocios de cada uno de nuestros
clientes, afirma Besier.
La Vedette
El R/3 es un sistema modular que reúne prácticamente todas las aplicaciones con las que una empresa puede manejar sus
negocios de una manera integrada. En él conviven aplicaciones para módulos financieros, que abarcan contabilidad
financiera, controlling o contabilidad de costos y activo fijo y un sistema destinado al manejo de costos de proyectos.
Además, el software reúne aplicaciones destinadas a controlar ventas y distribución, administración de materiales,
planificación y control de la producción, administración de la calidad y mantenimiento de planta. El R/3 también se emplea
en el área de recursos humanos. Todos estos módulos pueden funcionar individualmente, pero el verdadero poder del R/3
reside en su trabajo conjunto, que permite integrar los distintos procesos de negocios de una empresa, explica Besier.
Hasta el presente, el mercado proveía módulos individuales una empresa fabricaba aplicaciones para el área de finanzas,
otra para las funciones de contabilidad y esos módulos, al correr sobre diferentes plataformas y tecnologías, generaban
numerosas islas de información dentro de una empresa, y hacían que los usuarios debieran invertir tiempo conciliando
informaciones provenientes de sistemas diferentes. Según Besier, la diferencia del R/3 reside en que el cliente tiene
independencia con respecto a la plataforma tecnológica a emplear.
En la Argentina, Edenor, Mercedes Benz, Encotesa y el Deustche Bank ya emplean el sistema en sus operaciones. Este año
podríamos superar la barrera de los US$ 1.500 millones en ventas en todo el mundo. Y esperamos que la Argentina
comience a ser parte importante en nuestros negocios, señala Besier.